Tenían que practicar un un hechizo que serviría para transportar objetos desde un armario a otro, ese sería el proyecto final para Transformaciones y solamente Neville no podía hacerlo así que decide pedirle ayuda a Harry.
Pero nunca creyeron que e...
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Frente a él estaban los dos armarios, uno en la esquina izquierda del salón y el otro al extremo derecho, sus manos sudaban y se mordió los labios nerviosamente mientras caminaba para abrir la puerta del clóset, se agachó y colocó una pluma de color blanco dentro, lo cerró y apunto su varita hacia la gran caja de madera, apretó los párpados mientras recitaba en voz baja el conjuro.
—Cerris de puert. —Susurró Neville, rogando para que funcionara.
Un sonido del otro armario les llamo la atención, como un golpeteo; caminó rápidamente a la esquina derecha del salón y abrió la puerta con ansiedad solo para dar con nada, no había absolutamente nada dentro del armario, regreso al armario de la esquina izquierda para abrirlo y descubrir que la pluma blanca tampoco estaba allí. Suspiro pesadamente, con derrota y frustración, escuchó las risas de sus compañeros en sus espaldas y sintió una mano en su hombro.
—No puedo comprender porqué después de las quince veces que hemos practicado el hechizo de transportar objetos, no ha logrado ninguna exitosamente, señor Longbottom. —Dijo McGonagall con tristeza de ver de nuevo el fallido intento de su alumno.
—¿En verdad es necesario aprender a transportar cosas? ¿No puedo simplemente llevarlas de un lado a otro? Incluso con un búho. —Sugirió y vió como la profesora negaba.
—Es el proyecto final, señor Longbottom, tiene que aprenderlo para antes de que termine el otoño, sino tendrá que afrontar el haber reprobado mi materia.
El chico suspiro de nuevo y asintió, bajo los hombros más y se sintió más decaído, no sabía qué haría, miró un rato más el armario, intentando saber en dónde podría estar la pluma que había dejado dentro y en qué se estaba equivocando como para que el hechizo nunca saliera.
Era sencillo, sólo debía de hacer que un objeto se moviera a otro lado, usando una especie de teletransportación de objetos.
—Nev. —Escuchó que le llamaban por detrás y dio media vuelta para terminar por ver a Harry y a sus amigos. —Si quieres, puedo ayudarte después de clases, me ayudaría a practicar también.
A Neville se le iluminaron los ojos y sonrió de manera grande, asintió rápidamente y tomo la mano derecha de Harry para estrecharla fuertemente mientras la movía de arriba hacia abajo.
—¡Muchas gracias, Harry!
De esta manera, el pelinegro le sonrió y le dijo que se verían hasta terminar las clases, Longbottom terminó por irse entusiasmado, Harry era bueno enseñando, lo sabía porque habían estado practicando recientemente en el Ejército de Dumbledore y se había vuelto bueno en algunos conjuros de defensa gracias a él.
—¿Estás seguro de que podrás ayudarlo? No quiero ser pesimista pero Neville es... Neville. —Dijo Ron con una mueca y Hermione le golpeó el hombro.
—Neville es bueno, solo necesita alguien que le ayude, Harry es excelente en Transformaciones, sé que lo logrará. —Respondió Hermione y le sonrió Potter.
