Pacto con un vampiro..

capitulo #2

De la noche anterior no tengo muchos recuerdos vividos que digamos. Y lo que logro recordar son pequemos fragmentos, como si viese una escena de una película en la cual adelantas y rebobinas.

-Elenor, no tengas miedo.

Una voz un tanto gruesa pero a la vez tranquila era la que me estaba hablando, y se lo agradezco porque su voz logro sacarme de mis mas profundos pensamientos

-Se que no recuerdas mucho de la noche anterior, pero creeme, si no te hubiese mordido hubieras muerto. Tus latidos eran casi inaudibles y estabas sangrando mucho. En mi defensa, solo accedí a hacerlo porque no había nadie que pudiese salvarte, y mas en tu estado.

Mis ojos pasaban por su cara, examinando si me estaba diciendo la verdad o me estaba mintiendo.

-Quédate tranquila, mi mordedura no te convertirá por completo, por la pastilla que te di la cual inhibe el veneno en tu sistema. Pero si dejas de tomarla, que no te quepa la menor duda que seras un vampiro como yo, ya no podras disfrutar de los placeres que el sol diurno te ofrece..
El sol tocando suavemente tu piel, las olas del mar chocando tus piernas. Todos los placeres humanos seran borrados de tu vida, salvo que los disfrutes de noche.

Sus palabras estaban taladrando mi cabeza, no quería perder mi vida como humana, ya que disfrutaba de todo lo que el decía que perdería. Pero todo tenía un precio y el puso las cartas sobre la mesa.

-¿y cuál es el precio que tienen las venditas pastillas? Dije de modo sarcástico..

-Monetaria ninguna, pero firmaras un pacto, deberas permanecer conmigo siempre. Todas las noches por el resto de tu vida. Así obtendrás tus pastillas.

Su propuesta me dejo muda y vacilaba en contestarle. Pero no tenía muchas opciones si queria seguir disfrutando de la vida. De mis amigos y seres queridos.

-El pastillero que te di tiene siete pastillas para una semana entera, ire suministradote las demas lentamente, con esto, veremos si cumples tu palabra. En caso que no lo hagas sufrirás las consecuancias.
Y una advertencia, aunque tomes la píldora, los licántropos pueden olerte como vampiro aunque no apestes tanto como yo, decia mientras su risa hacía eco en todo el lugar, sonando un tanto terrorífica.

Gracias al veneno, digamos que eres mitad pampiro, tendras las habilidades propias de uno. Velocidad, curarte por ti misma e hipnosis. Pero todos los dias deberas beber un poco de sangre, tienes la opción de beber sangre humana o animal, pero para una mejor recuperación te aconsejo la humana.
Tu pierna curara por si sola, en cuantos bebas un poco.

No sabía, si era idiota o si se hacía, ya que en mi condición no podia salir a cazar.
Pero instaneamente como si leyera mi mente, me tendió un vaso lleno de sangre..

-Bebelo. Ordenó. La primera vez puede ser repugnante, pero con el tiempo te acostumbraras.

Con mis manos un tanto temblorosas agarre el vaso y dudando si era lo correcto o no, accedí..
Al llegar siquiera a tomar unos pequeños sorbos , tenia una tremendas ganas de vomitar, mientras pequeños colmillos desgarraban mis encias al tener el primer contacto con la sangre.
El sonido de mis huesos crujiendo y acomodandose, se hacian presentes y con ellos los alaridos de dolor.