Capítulo n°35: "Enemigos en todas partes".

Start from the beginning
                                    

-Se acostumbrará con el tiempo. Es una bebé bastante quisquillosa, pero es hermosa como Rojo.

-Ella es más tranquila, dormilona y no da trabajo.

-Ahh ya tienes una preferida ¿verdad? - niega entre risas Venus, aunque su comentario no es errado.

-Rojo me puede con su ternura, pero Critonita no termina de convencerme - las carcajadas de Marte son escandalosas, tanto que asustan a las niñas.

Hacia una semana desde la fiesta de la Diosa Blanca también de la fuga que atemorizaba a todos en el castillo y el planeta.

Los habitantes de Loto al no tener una noticia verdadera de la reina Luna retomaban poco a poco sus actividades, ya que, no podían detener sus vidas por miedo.

Qué ironía, ¿no? La persona que le infundía temor es la misma que un día le dio cariño y gobernó con total imparcialidad Loto. Hoy es una fugitiva condenada al exilio por apoyar a un traidor a la corona.

+++++++++++++

El rey Sol junto al rey Polen daban la bienvenida al príncipe Mejías con una fiesta rodeados de aliados y enemigos de su hermano. Ha nadie le sorprendía su visita tampoco los convencía su plan, pero tenían un objetivo en común: Neptuno.

La nave cóndor aterrizo en el cosmos azul aproximadamente al medio día. Adén descendió con Mejías mirando con recelo el sitio rodeado de aureolas boreal, la luz del día hipnotizaba siendo azul brillante y miles de asesinos, ladrones, exiliados que vitoreaban su nombre.

- ¡Príncipe Mejías nos dará la venganza que merecemos! - cantaban en coro cuando estrechaba la mano con los reyes.

Sol se creía uno, aunque no lo era para nada. Solamente es un acomodado por su historia y sed de matar, a quien le hizo semejante desaire.

Mejía forzaba una sonrisa en asentimiento al cantico, sin embargo, la multitud se reunió alrededor abriendo paso en un sendero rocoso repleto de piedras que caían instante a instante al precipicio.

El cosmos azul es una parcela redonda de tierra rocosa, aunque es infértil. Los desterrados se las han ingeniado para sobrevivir con magia o infiltrándose en planetas para robar comida, ropa o cosas que les permita vivir en comodidad.

Sin embargo, ellos poseen diamantes azules de escaso valor, pero sirve para la fabricación de un tónico curativo. Nadie conoce su camino porque se esconden en una galaxia perdida, aislado en el universo y navegando en el mal.

Al llegar a la ciudad, Adén se siente débil y va perdiendo fuerza, por lo que no puede tener control de sus poderes malévolos. El aire comienza a faltarle, su pecho se cierra y su corazón late desbocado como si alguien quisiera provocarle una muerte temprana.

-Sadius ya déjalo - pide el rey Polen al darse cuenta de esa vibración extraña entre los dos - Guarda tus trucos para cuando realmente lo necesitemos.

- ¿Qué es un brujo? - interroga Adén con el poco aire que logra exhalar - ¡Casi me matas!

-Esa era mi intención - respondió Sadius sosteniendo en su mano derecha un cayado rodeado de diamantes azules - A propósito, no soy brujo, soy un hechicero y tu magia aquí no sirve.

- ¿Por qué? No me veas como un enemigo...aquí también formo parte de esta alianza...

Sadius aprendió a no confiar en las palabras de brujos que siempre son utilizados en estas batallas de venganza. Conoce a la perfección los trucos que pueden llegar a usar por eso los visitantes tienen prohibido usar sus poderes con ellos así protegen a su pueblo.

RojoWhere stories live. Discover now