"Rompiendo las normas"

6."Una posible primer cita"

— A veces quisiera poder leer mentes para saber lo que estas pensando.

La voz de Easton hace que salga de mis pensamientos y vuelva a la realidad.

— No es necesario poder tener esa habilidad para saberlo, solo basta con preguntar en el momento indicado y la persona decidirá si puede confiar en ti.

— Tienes razón —asiente

— Dime algo que no sepa —digo mientras muevo mi cabello de un lado a otro, burlona.

Easton ríe.

— Dime Eli —voltea a verme serio— tu confías en mi?.

No se que fue lo que me sorprendió mas. El que me haya llamado “Eli” y no Elizabeth como acostumbra a hacerlo, o que me haya preguntado si “confió en el”.

Pueda que ambas, pero aun así tengo que responderle. ¿Confió en el?...

— Lo lamento Easton, pero después de lo que paso con Russ no me permito confiar en nadie —digo mientras observo mis manos que descansan en mi regazo.

— Ya te dije que no tienes que disculparte por cosas como esas, te comprendo. Pero quiero que sepas que hare lo posible para que confíes en mi, y si tengo que obligarte para que lo hagas, lo hare.

Al escuchar sus palabras levanto la mirada y me topo con unos ojos azules llenos de determinación ,y eso comprueba que esta hablando en serio, como todas las veces que me ve así.

— Debería preocuparme? —digo sonriendo, nerviosa.

— Deberías..—dice sin apartar su mirada de mi.

Permanecemos un tiempo observándonos, hasta que, como todas la veces, yo fui la primera en apartar la mirada.

— Espero lo cumplas.. —murmuro mas para mi misma que para el.

— Ya te dije, yo siempre cumplo mis promesas.

Asiento despacio y me centro en el lugar al que hemos llegado. Es una cafetería, por su apariencia puedo notar que es antigua, sus paredes son de color café oscuro y tiene blanco en todo el alrededor, al igual que su puerta. Tiene 4 ventanas grandes donde se pueden ver a las personas que se encuentran adentro.

Es un lugar muy diferente a los que acostumbro ir, y no me sorprende, he solido ir a los mismos casi toda mi vida.

— Que te parecen los lugares alejados de la ciudad?

— No esta mal

— Oh vamos, puedes darle un mejor cumplido a esta belleza

— Ok —rio mientras ruedo los ojos— es diferente, pero me gusta.

— Sabia que no eras una aguafiestas —dice mientras me da palmaditas en el hombro

— Yo no soy la aguafiestas, ese eres tu. Es lo que te define como persona
—sonrió.

— Aguafiestas o no, parece que disfrutas estar conmigo —dice, mientras choca su hombro con el mío.

— Talvez..—elevo los hombros

— Acaso nunca me darás un cumplido?, yo siempre te digo uno.

— No soy buena dando cumplidos, además, estoy segura de que no soy la única a la que le haces cumplidos
—cruzo los brazos.

— Estas muy equivocada..

— Si claro —ruedo los ojos— mejor comamos, tengo hambre

— Lo que diga la niña —dice mientras camina hacia la cafetería.