INVISIBLE STRING ― Pedro Pascal

-MENSAJES, VIDA REAL

"Joder", juró, enfocándose en la televisión.

"¿Qué pasa? ¿Te molesté?"

"No", respondió de inmediato. "Por supuesto que no, princesa. ¿Tienes algo en particular que quieras ver?"

Willow se movió, colocando su bebida junto a la de él y deslizándose por encima de una fracción. Ella colocó su mano sobre su rodilla y él inhaló profundamente, mirándolo, luchando contra el impulso de girarse y besarla.

"Pedro-"

"Estoy bien, corazón," dijo con fuerza, disparándole una sonrisa rígida.

"Pedro, no soy ciega. Y tú estás..." se detuvo, mirando hacia abajo, a solo unos centímetros de su mano.

Tragó grueso. "Lo siento. No quiero, estoy tratando de, joder, hueles tan bien. Y estás tan bonita hoy, no sé cómo te las arreglas para ponerte más bonita cada vez. ¿Cómo haces eso?"

Él la miró entonces, sus ojos fijándose finalmente en ella. Una sonrisa afectuosa se asentó en sus labios, pero cuando sus ojos se encontraron con los de ella, se mordió el labio inferior con nerviosismo.

"Yo... Willow, no quiero... solo ha pasado un mes desde..."

"Bésame", dijo con seriedad. "Bésame ahora mismo".

Su rostro parpadeó de sorpresa, mirando el suyo con cuidado, con cautela, tratando de detectar cualquier cosa que indicara que ella quería lo contrario.

Pero no encontró nada.

"¿Estás segura?"

Su mano se apretó sobre su muslo y ella inclinó su rostro hacia el de él.

"Bésame", suplicó suavemente, pidiéndolo, para él.

Gimiendo, se movió, girando en el sofá y cerrando la brecha entre ellos. Sus labios encontraron los de ella un momento después y casi gimió ante el sabor.

Sabía a cerezas y vainilla, y sol, como todo lo cálido, soleado y bueno. Sus labios se fundieron contra los de él, seguros y firmes.

Él la inhaló, su boca se abrió una fracción mientras él mordisqueaba sus labios. Sonriendo, dejó escapar una risita antes de besarla profundamente.

Ella se movió contra él, levantando su mano derecha y pasándola por su cabello. Él gimió en voz baja en su boca, dios, se sentía bien, y quitó una mano de su rostro, envolviéndola alrededor de su cintura, atrayéndola hacia él.

Ella levantó una pierna y él la atrajo hacia su regazo, colocándola suavemente encima de él. Se frotó contra él, burlándose de él. Una risa ligera cayó de sus labios a su boca. Su polla punzó con el sonido y luchó por tomarla en ese momento.

Él se apartó, mirándola a los ojos oscurecidos y los labios hinchados, chasqueando la lengua.

"¿Te gusta bromear?" Preguntó en voz baja, apoyando su mano en su cadera. Apretó suavemente. Ella jadeó, sus ojos revoloteando de placer. Una sonrisa tiró de sus labios. "A mí también."

Llevó su mano derecha a su cabeza otra vez, llevándola de vuelta a la suya y deslizando su lengua en su boca.

Cerró los ojos, deseando nada más que arrancarle la ropa restante y complacerla. Pero sabía que no podía. "Princesa, no creo que debamos ir más lejos".

La cabeza de Willow se movió hacia atrás, una mirada herida brilló en sus rasgos. "Oh, está bien, yo-"

"No, no así, corazón", le dio un beso en la mejilla. "Mi amor, quiero llevarte aquí y ahora", susurró en voz baja. "Quiero recogerte, llevarte a mi habitación y follarte hasta la mañana". Ella jadeó ante sus palabras y él le mordisqueó el lóbulo de la oreja de nuevo.

"Pero no podemos en este momento, no deberíamos, ¿de acuerdo? Necesitamos establecer qué es esto. ¿Te sientes cómoda en una relación? Porque no voy a follarte y luego volver a ser amigos. El respeto va en ambos sentidos".

Willow asintió, comprensión cruzando sus rasgos.

"Entonces," se apartó con una pequeña sonrisa. "¿A dónde vamos desde aquí?"

Antes de que pudiera decir algo, su teléfono vibró y miraron el mensaje.

DE CC TORRES-AGENTE

Willow frunció el ceño y lo tomó, abriéndolo para que ella y Pedro pudieran leer el mensaje.

"¿Por qué te está enviando mensajes?" Preguntó en voz baja.

Willow no respondió, pero su estómago se hundió cuando leyeron las palabras:

Necesitamos hablar.

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