INVISIBLE STRING ― Pedro Pascal

-INSTAGRAM Y MENSAJES Y VIDA REAL

18:14

Pedro:
Eres una gran bola brillante de energía cálida y feliz y no puedo evitar sentirme atraído por ti.
Eres como el sol y yo solo soy un planeta, gratamente atrapado en tu órbita.
(Mensaje no entregado.)

Willow:
Pedro, me estas haciendo llorar.

Pedro está escribiendo...
...

Mensaje leído a las 18:17

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Pedro se quedó mirando el teléfono que tenía en la mano, con la mente aturdida por las bebidas en la fiesta de despedida. Quería enviarle un mensaje de texto, habían pasado dos horas desde que ella respondió. Quería decirle cuánto significaba ella para él, cómo quería levantarla y alejarla de su propio dolor.

Levantó la vista, mirando a través de la habitación hacia ella.

La aparición de Willow gritaba desorden al azar, como si hubiera agarrado los dos primeros artículos en su remolque y se los hubiera puesto, olvidándose por completo de las piezas del disfraz.

Pedro sintió que el aire abandonaba sus pulmones, su boca se abrió un poco mientras la admiraba. De pie allí, riéndose con Jon Favreau de algo que no podía escuchar, se dio cuenta de que ella era la persona más hermosa que jamás había visto.

"Mierda", exhaló, tratando de apartar los ojos de ella. Todavía no había notado que la miraba fijamente, pero estaba seguro de que lo haría en un momento.

Una parte de él quería que ella lo notara, que sus mejillas se sonrojaran y una sonrisa tímida dibujara sus labios. Vivía para eso; hacerla sonrojar. Lo encontró absolutamente adorable y entrañable y no quería nada más que besar sus mejillas y decírselo como tal.

Él la miró de nuevo, dejando escapar un silencioso suspiro. Pedro no quería dejarla ir. Podía escuchar su risa desde donde estaba parado al otro lado de la habitación, fuerte y alegre, y eso le conmovió el corazón.

"¿Estás bien?"

Pedro saltó levemente, colocando una sonrisa en su rostro, pintándola sobre su expresión de dolor. No podía dejar que nadie más lo supiera, no ahora.

"¿Qué?" Preguntó, parpadeando y colocando una sonrisa en su cara.

"Te pregunté si estabas bien. Esta es la fiesta de despedida, no pareces muy emocionado", señaló Bryce Dallas Howard, su compañero de trabajo y amigo.

Pedro asintió. "Oh, sí", le restó importancia. "Estoy bien, gracias. Estoy cansado, esta semana ha sido una locura".

"Sí", estuvo de acuerdo, sus ojos se posaron en Willow, que se dirigía hacia ellos. "Bueno, si necesitas algo, ya sabes dónde encontrarme".

Pedro sonrió amablemente, asintiendo de nuevo. "Gracias."

Ella se fue y fue reemplazada por Willow un momento después. Olía a coco y vainilla, dulce, pero no abrumador.

Él le sonrió, notando que era casi una cabeza más baja que él. Siendo un hombre de estatura promedio, secretamente apreciaba que ella fuera mucho más pequeña.

El rostro de Willow se iluminó cuando él sonrió y su mano instintivamente la alcanzó, pero se detuvo justo antes de que llegara a su rostro, moviéndose hacia su rostro y rascándose la nuca con torpeza.

"Oye", dijo en voz baja. "No me respondiste el mensaje de texto", sus ojos se entrecerraron juguetonamente.

Su sonrisa se suavizó. "¿Te está gustando la fiesta de despedida?"