Polos opuestos (AlfaxAlfa) *En edición*

Reencuentro

La música resonaba por todo el lugar, con pasos decididos Kenneth se dirigía hacia la esquina derecha para encontrarse con su socio inversionista, con cada paso que daba la distancia se iba cortando. De pronto su mirada encontró a Wienczyslaw, sonrió y el pequeño alfa regreso la sonrisa. Estaban a un metro de distancia, cuando Kenneth sintió un abrazo.

Sus ojos se abrieron por la sorpresa, la persona de enfrente igual tenía los ojos sorpresivos. Kenneth bajo su mirada mientras intentaba apartar a la persona que lo estaba abrazando, en cuanto reconoció a la persona que lo estaba abrazando sus movimientos cesaron la mirada sorpresiva ahora era de confusión y de rechazo, antes de que pudiera articular alguna palabra, la persona que lo estaba abrazando fue rechazada por el pequeño alfa, quien se puso enfrente de él en una posición protectora.

Los ojos de Law se enfocaron en el chico que acababa de empujar, en seguida lo reconoció como aquel exnovio de Kenneth quien aún estaba presente en los pensamientos de aquel alfa. Sin darse cuenta empezó a emitir feromonas territoriales, sabía que no debía, pero su instinto le pedía que mantuviera alejado a ese omega.

El olor de las feromonas de Law llegaron a Kenneth, para tratar de tranquilizarlo le palmeo el hombro.

-Todo está bien- le dijo, no le extrañaba la reacción de Law pues éste ya sabía la historia que tuvo con Leo y como había terminado todo. Law dejo de emitir feromonas, pero no se movió de su lugar por lo tanto fue Kenneth quien se pasó adelante.

-Qué haces aquí- le pregunto a Leo.

-Vine a hablar contigo, podemos hablar en privado- le respondió Leo mientras miraba de reojo a Law.

-No pueden- contesto Law pasando una vez más a Kenneth atrás de él.

-y tu, quien eres- le pregunto Leo con una expresión de indiferencia.

-no es necesario que alguien como tu sepa quién soy- le respondió con un tono agresivo.

-Ken, por favor dile a este niño que se aparte y deje hablar a los adultos- dijo Leo, esta vez dirigiendo su vista hacía Kenneth

-No soy ningún niño y ya te dij- no termino de decir pues Kenneth le palmeo de nuevo el hombro.

-Es suficiente Law- dijo Kenneth, el pequeño alfa se desconcertó ante aquellas palabras.

-Bien, pues haz lo que quieras- le respondió, y se marchó del lugar, dando una última mirada a Leo quien sonreía, pues al final él había ganado.

Kenneth lanzo un suspiro, se tallo el puente de la nariz con sus dedos. Alzo la vista hacía Leo.

-Arriba hay una habitación, vayamos ahí- le dijo, sin esperar respuesta empezó a caminar en dirección a la habitación, al llegar entraron y se sentaron en la mini salita, uno enfrente del otro.

-Muy bien dime que es lo que me quieres decir rápido, tengo que arreglar algo urgentemente- le comunico Kenneth al omega.

-no me digas que ahora sales con él, es un alfa ¿no es así?, eso es antinatural- Le contesto y una pequeña risa escapo de sus labios.

-Con quien salga ahora no es tu asunto, y no es nada antinatural- sentencio Kenneth, decir eso tuvo más impacto en él que en el omega ya que nunca se le había pasado por la mente esa idea.

-Claro que es mi asunto porque estoy embarazado- dijo, se levantó, abrió su abrigo y su notaria pansa salió a la vista.

-Pues felicidades- le contesto.

-también debes felicitarte porque es tuyo- le respondió mientras volvía a sentarse.

Al escuchar eso Kenneth se quedó pasmado unos segundos, pero después soltó una sonora carcajada.

-Claro, y los carros ya vuelan- le comento entre risas.

-Deja de reírte, te hablo en serio, el niño que está creciendo y pronto saldrá es tuyo- le respondió mientras ponía una cara seria.

-mejor dicho, deja de decir tonterías, te fuiste hace meses con otro, y ahora resulta que ese niño es mío, crees que te creeré eso- le contesto, se levantó, camino hacia la puerta y la abrió –ahora vete-.

-sabía que reaccionarias así, por eso traje esto- saco de su mochila una carpeta y se la paso a Kenneth.

Kenneth reviso el documento que tenía frente a él.

-aquí dice negativo- le dijo, mientras le entregaba la carpeta.

-Claro que dice negativo, pues es la prueba de ADN con mi destinado, él es matemático así que se dio cuenta que las fechas no cuadraban, hicimos la prueba y cuando salió me corrió de su casa, me dijo que no iba a mantener hijos ajenos, que no volviera a buscarlo- le conto, mientras tallaba su panza –no te pido que regresemos, solo que me ayudes con el niño-.

-También quiero realizar una prueba, después de lo que me hiciste no confió en ti- le respondió –podemos hacerla mañana, conozco un laboratorio, le diré a Susan que te envié la dirección, si me disculpas me tengo que retirar- dijo, se retiró de la habitación.

Mientras regresaba a la fiesta, saco su teléfono y envió un mensaje.

¿Dónde estás?

Pasaron varios minutos hasta que obtuvo respuesta.

En mi casa.

Me puedes recibir, necesito hablar con alguien.

Claro, aquí te espero.

Dejo la fiesta y se dirigió a la casa del pequeño alfa.