Broken Souls | Kaz Brekker✓ PAUSADA

Midnight

HABÍA AMANECIDO HACIA UNAS HORAS, estaban desayunando en el campamento que habían encontrado la noche anterior, decidieron pasar la noche ahí. Eileen estaba sentada al lado de Jesper y tenía a Brekker delante. Estaban repasando el plan.

--- ¿Protocolo amarillo?

--- Disturbio.--- respondió Nina.

--- ¿Protocolo rojo?

--- Allanamiento.---dijo Jesper.

--- ¿I el negro?

--- Muerte segura.--- La Mercenaria habló. "No poder matarlos y llevarme toda la recompensa".

--- Fracasar no es una opción.--- intervino Kaz.

Después de desayunar siguieron caminando, esta vez Kaz iba detrás, observando a la Mercenaria junto a Inej y Jesper que estaban hablando. "Ella y Jes stán excesivamente juntos" pensó. La Mercenaria notó la mirada asesina de Brekker. La manera en la que se comportaba era muy extraña.

--- ¿Que es eso?--- preguntó Wylan señalando al cielo.

Había algo en el cielo, un Grisha. El suelo empezó a moverse. Un vendaval no podía hacer eso, estaba drogado.

"Genial, un Vendaval colocado de jurda parem"

El hielo comenzó a separarse, dejando a los demás a un lado y a Eileen y Brekker al otro. Se tuvieron que sostener unos a otros para no caer en la enorme grieta que había entre los dos trozos de hielo. Kaz intentó resistir, pero se dió cuenta de que sólo no aguantaría mucho más tiempo, cogió la mano de la pelirroja.

Aunque las dos manos estuvieran enguantadas Brekker sintió otra vez los temblores. Se acercó aún más, el temblor era tan fuerte que casi lo tuvo que abrazar para que ninguno de los dos cayera. Pero también sentía algo más, los dos estaban muy cerca. Oía la respiración errática de la Mercenaria, sus mejillas pecosas estaban rojas del frío. Notó que una llama de encendía en su corazón. Ese corazón que creía muerto desde hace años.

Por su parte Wekvelt se aferró al chico tan fuerte como pudo. Pudo percibir que temblaba ante su tacto, pero no tenía tiempo para preguntarse el porqué. Jesper empezó a disparar, no funcionó, algunas balas le dieron pero seguía vivo. Lo mismo pasó con las dagas de Inej.

--- Wylan --- dijo Jesper cuando se rindió.--- sacanos de aquí.

Dejó un explosivo en el suelo, lo golpeó y corrió a esconderse.

--- ¿Esa cosa matará al Grisha?--- se burló Matthias incrédulo.

BUM.

---- ¡Al suelo!--- gritó Van Eck.

Todos la obedecieron, a continuación se desencadenó una fuerte explosión. El Vendaval cayó. Estaba herido y no paraba de pedir más dosis. Wekvelt levantó la vista para asegurarse de que Kaz estaba bien, suspiró cuando lo vió a salvo.

--- Soy yo...--- le repetía Nina, era evidente que lo conocía.

--- Parem, necesito parem.

--- Te puedo ayudar.

--- No quiero tu ayuda.--- hizo una pausa--- ¿Donde están?