Especial •§• Gun

Começar do início
                                    

—Tenga cuidado con su lengua o puede quedarse sin ella un día de estos, señor. —Respondió Off— me vale una pila de mierda que sea el padre de este chico y que esta sea su casa. No permito ofensas para mí y justo ahora, para Gunnie tampoco.

Gunnie…

A Gun se le revolvió el estómago de una manera extraña, pero se volvió hacia Off con su mejor cara de póker. —Ya vete. No sé a qué estás acostumbrado, pero no es correcto que repartas amenazas así por todos lados.

—Deberías escuchar, remedo de maleante, —dijo el viejo sucio, como Off lo había llamado en su mente— es la primera vez que lo escucho decir algo sensato.

Gun vio como un músculo en la cara de Off se tensó y llevó su mano a la parte posterior de su cuerpo, por debajo del saco que llevaba. Gun no era tonto y había visto muchas películas como para saber que probablemente de ahí sacaría un arma.

Rápidamente se paró frente a Off y le dio una mirada suplicante, esperando que el hombre no hiciera una barbaridad como apuntarle a su padre con una pistola. Quizás se merecía el susto, pero no quería escuchar más mierda del viejo por el resto del día al menos.
Off entendió y volvió su mano vacía al frente.

—Vámonos gatito —dijo en voz baja— Puedes ayudarme a buscar a tu amigo si quieres. —Gun negó con la cabeza, pero Off no le hizo caso. Lo tomó otra vez del brazo y empujó en dirección al auto—. No vas a quedarte aquí a seguir oyendo mierda de tu padre¸ puedes regresar al hospital con la mamá de Bright.

Gun se dejó guiar de regreso por la acera, escuchando los gritos de su padre desde la puerta. Los que tendría que escuchar de nuevo cuando volviera, pero justo ahora se iba con Off a donde fuera que lo llevara. Nunca le había gustado que otros hombres lo vieran como débil y necesitado de protección. Gun podía protegerse a sí mismo, pero había algo diferente en la manera en que Off lo defendió. Se veía preocupado por él, más que verlo como una criatura indefensa. Gun recordó que clase de persona era este hombre. Un mafioso que trabaja para otro mafioso y estaba quizás solo burlándose de él como todos los demás lo hacían.

—Déjame solo. No necesito que me defiendas. —Gun se detuvo antes de que Off lo arrastrara dentro del auto otra vez.

—No lo necesitas gatito. De eso estoy seguro, pero odio a los tipos como tu padre. Arrogantes y que se creen con el derecho de minimizar y ofender a los demás.

—Tú no eres mejor.

Off resopló

—No, no hay comparación. Soy y hago todo lo que te imaginas y mucho más, pero no desprecio a las personas y menos a las que se supone son mi familia. Puedo abrirle la cabeza a alguien de un disparo sin remordimientos, pero cada una de esas personas a las que les he vaciado el cerebro se lo merecían. He insultado y molido a golpes a tantos como no lograrás alcanzar a contar con todos tus dedos, pero si alguien tiene algo que decir, han sido personas tan malas o peores que yo y los negocios que ayudo a Win a manejar son la forma en que aprendimos a ganarnos la vida; e ilegal o lo que sea, cada quien hace de sus vidas el infierno que desea, comprando las armas o las drogas que nosotros les ofrecemos.

Gun lo vio con los ojos muy abiertos. —Definitivamente no eres mejor.

—No, gatito —respondió— te dije que soy peor, pero nunca voy a insultarte o tratarte como menos de lo que eres.

—Yo te traté así el otro día.

Off metió a Gun en el auto y cerró la puerta, para dirigirse al otro lado y meterse en el asiento del conductor, antes de responder

—Lo hiciste, sí.

—Pero tú me defendiste.

—Lo hice.

—¿Por qué?

—Porque eres lindo y sé que esa personalidad tuya y tu actitud enfurruñada es solo una máscara. Hablas sin pensar para contraatacar como si siempre te estuvieran acechando, pero no es lo que eres. Escondes algo gatito y en cualquier momento voy a descubrirlo.

Gun miró por la ventana del auto, sonrojado y avergonzado. Incapaz de decir algo para desmentir a alguien a quien solo ha visto un par de veces y parece poder ver a través de sus ojos como un manantial.

—No soy lindo.

—Oh, sí lo eres y eso me gusta. Tú me gustas.

—No soy gay —renegó Gun.

—No dije que lo fueras, pero yo sí y no tengo problema en decirlo ni en decirte que me gustas. Eso no te obliga a cambiar de parecer.

El teléfono de Off sonó con una llamada de Jeff desde el lugar donde se suponía, estaban los hermanos de Build. Ahí fue a donde se dirigieron sin que Off dijera nada, ni que Gun hiciera alguna otra pregunta.








 Ahí fue a donde se dirigieron sin que Off dijera nada, ni que Gun hiciera alguna otra pregunta

Ops! Esta imagem não segue nossas diretrizes de conteúdo. Para continuar a publicação, tente removê-la ou carregar outra.
INTERESES  ლ [Adap. BrightWin]Onde histórias criam vida. Descubra agora