Era una tontería.
'Incluso si digo que me arrepiento, ya es demasiado tarde'.
Ya he decidido quién estará a mi lado, y él no deja sentimientos por mí.
Además, me dijiste eso mientras estábamos casados.
No era diferente a verme como alguien tolerante.
Sin embargo, era seguro que no quedaba ningún protagonista masculino que se pusiera del lado de Tatiana.
'Cualquiera que estaría de mi lado sería Raymond.'
Ahora que lo pienso, tenía algo con lo que lidiar cuando conocí a Raymond.
La familia Kassel tuvo que pagar el precio del problema.
Philia abrió la boca con una risa extraña hacia mí, que se perdió en otros pensamientos por un momento.
"Oh, escuché que el Marqués de la Libertad visitó a la Gran Duquesa hace un tiempo".
"Mmm."
El Marqués de la Libertad fue uno de los pocos que se opuso a casarse con el Archiduque.
En particular, tan pronto como supo que Andrew era miembro de la familia real, se opuso aún más.
"No supe cuando escuché la historia, pero dijeron que fue una reacción más grande que cuando dije que era el hijo mayor de un vizconde".
¿Es porque le preocupa que su hija se involucre con la familia imperial? ¿Es por eso o por alguna otra razón?
"Muchas gracias por dejarme saber lo que sucedió en el mundo social mientras yo no estaba".
"¡Por supuesto! Estamos del lado de Karina-sama."
Me sorprendió un poco la reacción exagerada de Regina, pero ahora se ve muy linda.
Después de eso, el tema volvió a mi compromiso.
"Espero con ansias tu compromiso".
"yo también."
Ambos parecían tener expectativas bastante altas de mi compromiso.
Para ser honesto, no era mi primer compromiso, así que no me impresionó mucho.
Por alguna razón, sentí pena por Aster.
"Ni siquiera es la primera vez que se comprometen, entonces, ¿qué hay para emocionarse?"
"Sin embargo."
Me reí moderadamente y hablé con ellos.
Hasta este momento, pensé que no sería diferente de nuestros compromisos anteriores.
* * *
Mi madre, a quien Allison había visto, me llamó de repente.
"Lo escuché de tu padre. Dijo que estaría comprometido con Su Majestad".
"Sí."
Madre guardó silencio por un momento.
Y me habló con voz firme.
"Estoy en contra de este compromiso".
"¿Sí?"
¿Qué escuché ahora?
Incliné la cabeza y pregunté.
"¿Estás en contra del compromiso?"
"bueno."
Hasta ahora, mi madre nunca se había opuesto a mi compromiso, y mucho menos a mi padre.
Mi madre siempre creyó en mí.
