Entrando al camp estaba Gallardo, lo saludé así nomás y de paso me crucé con Agus.

- Eh papá. - Me dijo saludándome.

- ¿Qué onda Pala? ¿Cómo va eso?

- Y acá estamos para matar a los bosteros en el clásico de hoy.

- Olvidate, mueren.

Bromeamos y él me contó algunas boludeces antes de que haya empezado el entrenamiento, ya casi todos estaban en el camp y eran casi las 12. Para mí mala suerte soy una persona muy expresiva y Agus notó de una que algo me pasaba. Y sí. Lo de Julián.

- ¿No me vas a decir que te pasó? Mirá que te necesitamos 100%

- Y nada Pala, boludeces. Después te digo que viene Gallardo ahí y nos va a cagar a pedo.

La primera sesión fue de 1 hora con 5 minutos de descanzo. Íbamos a estar así hasta las 15:00. A las 13:00 nos llamaron a comer pero nos dieron agua, ensalada y unas proteínas. Con Julián cruzábamos miradas pero nada. Yo no quería hablarle en realidad. Algunos se daban cuenta porque siempre nos la pasamos juntos pero ahora nada. Igual nadie preguntaba, pero si hacían alguna que otra broma.

Entre entrenamiento y entrenamiento pasaron unas 2 horas y eran las 15:00. Teníamos que seguir en el camp todo el día por órdenes previas a un partido tan importante como un superclásico. No seguimos entrenando pero teníamos que seguir ahí y fue un castigo para mí porque no quería ni ver a Julián.

El partido es a las 19:00.

Es mi primera vez para jugar un superclásico, en el del 2021 si me concentraron pero no entré, Julián hizo doblete y terminó 2-1.

Cada vez que se hablaba Boca vs River no podía evitar pensar en Gigi. Ella es de Boca y siempre peleábamos y nos jodíamos por ese tema, al final no llegamos a ver la final de Libertadores juntos. Ella me decía siempre que si algún día nos River y Boca jugaban una final de Libertadores lo teníamos que ver juntos. Tantas cosas arruiné por pajero. Pensar me hace muy mal, me hace extrañarla y extrañar a la hermosa chica que alguna vez tuve a mi lado.

Narra Gigi.

- ¿Está rica la comida mi amor? - Le dije a Lio mirándola mientras comía. Ella asintió con la cabeza y siguió comiendo.

Mi mente sólo estaba en lo que había pasado hoy con Enzo. Tenía que contarle a Joa. ¿Pero cómo le iba a contar? Realmente no sabía que hacer y por mi mente pasaban mil cosas. Esperar que Lio se olvide de Enzo no es fácil porque ella es grande. En cualquier momento va a querer que él vuelva y más ahora que Joaquín está lejos y no la puede distraer. Y yo, jamás puedo decirle que no.

Mientras Lionella comía yo me puse a ver mi celular un rato, que ya nisiquiera sabía que pasaba, o si Joaquín me había hablado, pero seguro no.

Desbloqueé mi celular y tenía mensajes de varias personas. Respondí algunos, le respondí a Agus que hace bastante no hablábamos. También tenía un mensaje de Zeballos.

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¿por qué ella sí? ; enzo fernándezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora