Tensura x Tú [Pedidos Abiertos]

Diablo x Lectora

Pedido por: tempestMikasa

Espero sea de tu agrado.

Diablo x Lectora

"Toc Toc" alguien golpeó la puerta de tu oficina, tenías en mente a cierto demonio que te visita muy seguido, por lo cual dijiste "Adelante".

Tu intuición no falló, ese lindo y atento demonio ingresó a tu oficina. En sus manos una charola, en ella una porción de tarta de chocolate y un café con crema.

—Buenos días, ____— Saludó dejando la charola en tu escritorio. —Te he traído el desayuno

Ahí estaba, esa sonrisa de suficiencia y a la vez tierna, como pidiendo un cumplido para ser felíz.

—Muchas gracias cariño, eres mi salvación cada mañana— Una respuesta sutil pero suficiente para llenar al demonio de alegría, aunque no iba a demostrarlo abiertamente, solo daba una sonrisa

Pov Lectora:

Sino me equivoco, este es el día número 143 que viene a traerme el desayuno sin que yo se lo pida. Me pregunto si lo hace a propósito o en serio no se da cuenta de su forma de actuar cerca de mí.

Al principio venía a reunirse conmigo porque Rimuru estaba ocupado, pero viene literalmente todos los días desde entonces.

No es que me moleste, en realidad, le tomé cariño por la atención y lindos gestos que me da, me gusta charlar con él, es inteligente, me defiende de idiotas y me ayuda con la empresa.

—____, ¿Quieres que revise los documentos mientras desayunas?— Se ofreció Diablo sentándose a mi lado

Este tipo de cosas me gustan de él, quizá deba comenzar a pagarle un sueldo.

—Sería de mucha ayuda— Respondí sincera, son muchos los documentos que entraron esta semana

Mientras Diablo se ocupa del trabajo, yo aprovecho para desayunar. Me gusta observarlo leer y firmar, se ve tan en paz y concentrado.

Luego de varios minutos leyendo ví una mueca de disgusto en su rostro.

—¿Umm? Esta es una propuesta estúpida— Murmuró Diablo y rechazó la carta con su firma.

—¿Oue erra? (Qué era)— Pregunté con la boca llena, eso me avergonzó un poco.

—Alguien quería invitarte a bailar, pero a ti no te gusta bailar— Respondió y limpió mis mejillas con un pañuelo. —Es de mala educación

—Hablar con la boca llena, lo sé— Terminé su oración y me apoyé sobre mis manos en el escritorio mientras lo miraba. —¿Sabes todo de mí?

—Un par de cosas—

—Entonces dime, ¿Qué par de cosas sabes de mí?— Insistí

—Te disgusta el membrillo, el baile, que te hagan esperar, los niños, que no toquen antes de entrar, la ropa abrigada, etc.— Estaba por hablar pero continuó.—Te gusta el café muy dulce, la puntualidad, ir al cine, la moda, jugar fútbol, apostar, pelear, y otras cosas

Si bien son todas cosas que puede aprender al observarme y mientras hablamos, me sorprendió que recuerde tanto. Pero es Diablo, debí esperarlo.

—Y te pone de malhumor cuando no vengo a verte—

Eso es verdad, pero no era necesario que lo dijera, en ocasiones es un idiota.

—Y tú te pones celoso si alguien me invita a salir— Respondí esperando molestarlo

Contrario a eso sonrió, y me tomó del mentón. ¿Él va a besarme? ¿Así sin más?.

—Porque quiero que seas solo mía, ____—

—Diablo...¿Sabes que es lo que yo quiero?— Coloqué mis brazos detrás de su cuello, acortando un poco la distancia.

Diablo no respondió, en su lugar cerró la distancia entre nuestros labios, comenzando un beso muy esperado por ambos. Y voy a admitirlo, se sintió mucho mejor de que imaginé.

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