──haceme el favor y dejame pasar, chichón de piso.
──¿qué culpa tengo yo de que sea' un poste de luz?
donde lionel y emiliano se conocen en la sub 20. y donde una rivalidad que parece nunca decrecer, se reduce a la nada misma luego de un par de encu...
──basta con los golpes que en cualquier momento me reemplaza un suplente ──dijo dibu. messi volvió a reír, negando con la cabeza.
emiliano hizo la seña al cuerpo técnico de que se encontraba bien y no necesitaba ninguna revisión. aún así, los enfermeros se acercaron para darle una gasa y limpiarlo cuidadosamente. le revisaron la nariz y volvieron a su lugar en seguida.
──no te me muera' que te necesito. ──martínez miró a messi, que aún se encontraba a su lado y tragó en seco al escuchar aquellas palabras. otra vez su latido se aceleraba.
──¿me necesitás? ¿desde cuándo? ──lo molestó. ──pensé que me odiabas.
lionel puso los ojos en blanco, alejándose del arquero para disputar los últimos minutos del primer tiempo que quedaban.
──sí, te odio sabé', so' un boludo ──le respondió messi a una distancia considerable, donde no hablaba bajito pero tampoco tenía que gritar.
──¿pero me necesitás, o no?──le gritó, la distancia había aumentado.
messi únicamente sonrió, ignorando su pregunta y finalmente alejándose lo suficiente como para no escucharlo en absoluto. emiliano suspiró, intentando concentrarse en el partido. tendría todo el tiempo del mundo para estar con messi después de ganar.
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luego de la victoria y de un festejo que no duró mucho más de una hora, los jugadores comenzaron a retirarse del predio.
los brasileros habían sido locales así que el equipo argentino se estaba quedando en un hotel de los alrdedores. los compañeros de habitaciones se mantenían igual que en el predio de la afa.
cansados, llegaron al comedor a recibir la cena. otamendi puso música de fondo, mientras comentaban los momentos destacados del partido. la estaban pasando de diez.
emiliano no podía dejar de pensar en lo que lionel le había dicho. en que lo necesitaba. claramente había sido en un sentido de puro compañerismo. como cualquier delantero necesita a su arquero. sin embargo, ignorando el contexto, aquellas palabras eran bastante fuertes de decir.
la cena terminó y cada uno comenzó a subir a sus respectivas habitaciones. messi iba hablando con agüero, mientras que martínez iba con cuti y licha.
la habitación de ambos quedaba sobre el mismo piso, así que una vez que llegaron, se saludaron entre todos y entraron a sus respectivas habitaciones.
las horas comenzaron a pasar. mañana tendrían otro partido pero martínez no podía conciliar el sueño.
decidido, tomó unas bermudas con una musculosa y salió de su habitación cuidadosamente, para no despertar a otamendi. de todas formas, este último tenía un sueño pesado, así que ni siquiera lo notó.
salió y lo primero que vio fue a lionel, sentado en las escaleras con los auriculares y mirando al piso. estaba vestido con las mismas prendas que él.
