Louis: Harry di algo, no me dejes en visto, por favor.

Solo en ese momento se dio cuenta de que aún no le había respondido. Tomo una bocanada de aire y con sus dedos temblorosos apretó la pantalla para escribir.

Batería demasiado baja.

–¡No! ¡No!

El rizado comenzó a apretar el botón de encendido pero el teléfono se había descargado por completo. Maldijo en voz baja y como loco busco por toda su habitación el cargador. Maldijo una vez más al no encontrarlo. Ahora Louis iba a pensar que él no quería responderle y que lo había dejado en visto a propósito.

Recordó el mensaje y supuso que el castaño vivía con Stan, así que agarro su cartera y llaves y salió corriendo. Bajo las escaleras rápidamente y sin siquiera despedirse de su madre salió de la casa.

Le dio gracias a Dios de que Stan vivía cerca y podía ir caminando, y como no podía perder tiempo, comenzó a correr. Sus largas piernas y que estudiara Educación Física lo ayudaron a llegar más rápido. Cuando estuvo solo a algunas casas paro y comenzó a caminar tratando de controlar su respiración agitada. Se pasó una mano por el cabello tratando de peinarse. Agarro una bocana de aire y toco la puerta con sus nudillos. Se comenzó a balancear allí de pie nervioso. La puerta se abrió revelando a Stan con sus ojos algo hinchados.

–¿Harry? –El tono de sorpresa era evidente en su voz–. ¿Qué haces aquí?

–¿Esta Louis?

Stan bostezo estaba a punto de quedarse dormido cuando el timbre sonó.

–No, él no vive aquí.

–Pero...

El miedo comenzó a invadir el cuerpo del chico. Sus manos sudaban y aunque las limpiaba a cada momento con sus pantalones el sudor volvía a aparecer.

–Él me conto todo de su pasado –Harry dijo mirando a Stan–. Y cuando fui a responder el teléfono se me descargo y no encontré el cargador. Ya sé que tal vez estoy exagerando todo y puedo esperar hasta mañana y hablar con él. Pero...

–Haces lo correcto –Stan lo corto–. Louis es muy sensible con eso, no me quiero ni imaginar cómo estará, es mejor que vayas.

Harry se gravo la dirección mentalmente y agarro un autobús allí mismo. Reposo su cabeza contra la ventana mientras veía las casas pasar. Louis vivía un poco más lejos y si se iba caminando lo más probable es que llegara demasiado tarde. Se bajó en la parada y busco con la mirada una casa anaranjada.

La encontró y se percató que era demasiado chiquita como para vivir una familia, pero luego de acordó de que Louis no tenía familia.

Con pasos indecisos se acercó hasta la puerta y toco. Toco de nuevo pero nadie salía, volvió a tocar y su cuerpo comenzó a hiperventilar cuando al quinto toque nadie salía.

¿Louis, dónde estás? –susurro.

Mirando para todos lados por si alguien veía, agarro el pomo de la puerta y vio que estaba sin seguro, volvió a suspirar y despacio abrió. Y lo que se encontró hizo que su corazón se partiera en miles de pedacitos si eso era posible.

(...)

Louis con dedos temblorosos termino de mandar el mensaje y cerró los ojos. Se acostó y espero un momento, volvió a mirar la pantalla del teléfono y...

Visto a las 17:00✓✓

Sabía que tenía que esperar porque el mensaje era largo y tenía que darle tiempo al rizado de que leyera el mensaje. Tenía una mala sensación de que había leído el mensaje y que justo en ese momento había expuesto su pasado a otra persona.

El recuerdo de Joshua vino a su memoria. Cuando lo golpeaba y lo obligaba a posar desnudo para luego vender las fotos. Trato de tranquilizarse, Harry no era así, y tampoco era como Gustavo, aquel chico que le había confiado su pasado y lo había humillado de la peor manera. Lugo de pasar varios minutos. No obtuvo respuesta. Aunque sabía que eso era rebajarse demasiado, tecleo:

Louis: Harry di algo, no me dejes en visto, por favor.

Visto a las 17:08✓✓

Vio que las palomitas se colocaron de una vez y luego...

Ultima conexión hoy a las 17:10.

El miedo se apodero de su cuerpo. Sus manos comenzaron a temblar y quiso pensar lo mejor posible. Pero sabía que no era así. Con Gustavo había pasado lo mismo, el visto, luego la conversación impresa y luego él llamándolo maldita perra sucia.

Se paró como pudo de la cama aun con el teléfono en la mano. Mantenía sus esperanzas. Atravesó la puerta y de inmediato llego a la cocina, en las gavetas busco un frasco con antidepresivos y se los tomo. Salió hacia la sala y cayó al piso con sus lágrimas bajando por todo su rostro.

Se acomodó mejor en un rincón y abrazo sus piernas, los sollozos se hicieron presentes y Louis solo trataba de mantener la respiración normal. Sabía que tenía que mantener la calma no podía tener otro ataque de pánico, no. Ese era su pasado. El Louis actual era fuerte.

Con eso en mente trato de parar de llorar, pero luego un pensamiento fugaz llego a su cabeza.

"Eres una maldita puta, una escoria, nadie jamás te va a querer cuando sepan que tu cuerpo paso por más de uno"

Esa era la voz de Gustavo resonando en sus oídos. Él tenía razón, nadie nunca lo iba a amar. Joshua lo había vendido, Gustado humillado y Zayn había jugado con su cuerpo, solo follándolo de manera brusca.

Sintió que el aire le faltaba y trato de callar sus sollozos. La puerta comenzó a sonar. Alguien estaba tocando. Pero él no tenía la fuerza para levantarse y no quería que nadie lo viera en ese estado. Con una mano tapo su boca tratando de apaciguar sus sollozos. Los golpes en la puerta se detuvieron, pero todo fue peor. La puerta comenzó a ser abierta. Louis comenzó a asustarse mucho más así que se abrazó más a sí mismo.

La alta figura de Harry se dejó ver cuando la puerta estuvo totalmente abierta.

–¿Louis? –La voz ronca de Harry era un susurro.

El castaño solo escondió su rostro. No, no él. Él no tenía que verlo así.

–Vete –hablo con la voz entrecortada.

Harry con el corazón en la mano se acercó hasta él poco a poco, se arrodillo hasta su altura y con miedo poso su mano en su rodilla, Louis tembló ante el contacto, Harry agarrando más valentía le levanto el rostro poco a poco. Sus ojos azules estaban rojos e hinchados. Louis sorbió un poco por su nariz e hipo.

–Por favor –rogo.

El rizado lo miro tan vulnerable. Así que dijo lo que en ese momento sentía:

Solo sé que eres una maravillosa persona. Una persona buena a la que le ha pasado cosas malas.

Louis se tiro a los brazos del rizado y escondió su rostro en su cuello. Eso era lo único que necesitaba oír. Harry lo abrazo con todas sus fuerzas, cerrando los ojos en el abrazo. Él amaba a Louis y no lo podía negar.

–H-Harry, yo... –Louis trataba de hablar, pero su llanto no le dejaba, comenzó a hipar al no poder hablar y apretó más fuerte al menor en el abrazo.

–Shh, no tienes por qué hablar, estoy aquí, y de aquí no me voy.


Visto✓✓  {Larry Stylinson}Där berättelser lever. Upptäck nu