Waiting for the sunrise [LS]

Capítulo 2

Harry llegó tarde una vez más.

La señorita Emily estaba por iniciar la clase cuando entró al salón. Louis ya estaba sentado y escribiendo algunas cosas en su cuaderno.

Tomó asiento a su lado y el omega solo le dirigió una rápida mirada. Estaba sonrojado.

-Hola, Louis.- El omega le dirigió una pequeña sonrisa y un saludo que parecía más un susurro.

Unas marcas rojas llamaron la atención del alfa, adornaban las muñecas del pequeño omega.

-Louis, ¿Qué te pasó en las muñecas? ¿Alguien te lastimó?

El omega se tensó en su lugar y abrió su boca pero ninguna palabra salió de ella.

-Erhm, s-solo estaba jugando con mi hermana.- Harry no creyó la explicación de Louis, pero no tienen una relación cercana como para seguir preguntando.

La clase terminó y solo pudieron avanzar un poco del proyecto. Louis guardaba sus cosas apresuradamente y pudo notar como el omega tenía incluso algunas pequeñas marcas rojas en cuello y mandíbula. Apretó los dientes, alguien estaba dañando a a Louis.

-Louis, ¿Crees que esta tarde podemos reunirnos en mi casa o en la tuya para avanzar un poco más con la tesina?

-Oh, esta tarde no puedo, pero mañana puedes ir a mi casa, estaré solo por la tarde y tendremos algo de tranquilidad para avanzar.

-Está bien. Estuve investigando un poco sobre Sunrise y las prácticas que maneja y es interesante todo tipo de cosas que hacen las personas que van a tener encuentros para que el público observe.

-Oh, si. He leído qué hay mucha libertad para hacer con tu pareja o parejas sexuales, nadie juzga y disfruta de su noche viendo a extraños manteniendo contacto sexual. Lo lamento, tengo un poco de prisa, si me disculpas, tengo que usar el baño.

El omega salió a toda prisa del aula, iba un poco apresurado y nervioso. Extraño.

El resto del día pasó muy lento. Louis prestaba atención a todas las
clases y Harry se dedicaba a observarlo tomar apuntes sobre cada cosa importante que salía de los labios de los profesores.

En la hora de salida, Louis y Liam caminaban a unos cuantos metros de Harry. El omega se veía algo animado y parlanchín. Algo extraño de ver en una persona que apenas abre la boca para dar una pequeña aportación a la clase.

Esa mañana, Cindy, una omega de pelo azul y ojos profundamente cafés, tuvo el valor de invitar a Harry a su casa a ver una película. El alfa no era tonto, esa omega tiene tiempo intentando meterse en sus pantalones y muy amablemente declinó su oferta. Como todas las anteriores.

Cuando llega a casa, lo primero que ve es a su hermana cuidando de Lea. Marisa es un alfa alta, delgada y de rizos claros, ojos cafés y pestañas largas. Ella llega de la escuela una hora antes que Harry y normalmente juega con Lea al llegar a casa. Su padre está en la cocina terminando de preparar la comida, hablando por teléfono con su madre que seguramente no tarda en llegar del trabajo.

Se dirige a su habitación, esa noche tiene planeado volver a visitar Sunrise, así que inmediatamente abre su mochila y saca su cuaderno de Metodología para revisar el avance. No es mucho lo que han agregado a la tesina, pero al menos está empezada.

La tarde transcurre como normalmente tendría que transcurrir. Comida en familia, charlas sobre cómo fue el día, risas sobre las historias de aventura que cuenta Lea (o intento de ellas), burlas sobre su hermanita enamorada de una linda omega de ojos azules que va en su mismo grado.

El agua corre por todo su cuerpo, sus rizos empapados casi llegan a sus hombros. Se asegura de tallar perfectamente cada rincón de su cuerpo y acondicionar las puntas de su cabello. Hace unas semanas decidió dejarlo crecer y es una difícil tarea mantenerlo sano y lindo.