〔Why'd It Have To Be Him?〕; Spruan

〔 Capítulo 4 〕

-¿Vas a matarme ahora, Tanizen?, adelante, que no hay huevos.

-¿Carola?- Aquel nombre alertó a Juan, poniendo más atención en la apariencia del vikingo.

Dios, si antes le parecía algo intimidante ahora daba el doble de miedo.

Su cabello rubio se encontraba rapado completamente por los costados, teniendo como excepción la trenza que siempre llevaba. Su rostro tenía varias marcas de batalla, siendo la más notable una cicatriz que recorría todo el lado izquierdo. Portaba un uniforme peculiar, no perdía el toque de vikingo en sí mismo, pues aún contaba con peluche en el cuello de la capa que usaba -la cual ahora que notaba, era piel de un lobo-; el resto del uniforme constaba de una camiseta a manga larga de color negra, pantalones de vestir igualmente negros y una corbata roja, si los veía bien parecían meseros más que soldados.

-El mismo, ahora te sugiero que bajes el arma, dejen de hacerse los graciosos y colaboren, el Patrón va a apreciar que sean dóciles.

-¡No iremos a ningún lado con el oso loco!- Gritó Noni, yendo al lado de su antiguo jefe para no dejarlo solo.

Esta respuesta pareció no gustarle al vikingo, Juan lo vio comenzar a sacar detrás de sí un arma; ah no, él no iba a permitir que este pleito volviera a escalar.
Salió al frente de todos, siendo visto recién por todos los hombres uniformados, había permanecido escondido detrás de Drako a petición de este, quien al momento de que el ataque comenzó había evitado que fuera visto por todo el grupo.

-¡Esperen, no tenemos que llegar a nada que lastime a otra persona!; si vamos con ustedes ¿no van a lastimarnos, verdad?

Hubo un momento de silencio, uno donde Carola miraba fijamente a Juan. Eso lo ponía nervioso, pues realmente preferiría regresar entero a su dimensión.
Tal parece que el silencio del vikingo no lo alertó solamente a él, pues uno de sus compañeros -a quien reconoció por la voz como a Robleis- le habló.

-¿Carola?, ¿todo bien?

-... Si, si, todo correcto.- Reaccionó finalmente, volviendo a dirigir su mirada a Juan.- Si vienen de forma pacífica no tendremos necesidad de hacerles daño.

-Ya estás, nos rendimos.

-¿¡Cómo que nos rendimos!?

-A ver, ¿si se dan cuenta de la situación donde estamos, verdad?- Se acercó al grupo con el que había llegado, realmente no le apetecía tener que pelear o rogar por su vida en un momento así.- No estamos en condiciones de pelear, lo mejor es hacer lo que dicen y tal vez podamos llegar a un acuerdo.

Tanizen y Noni realmente querían protestar ante aquello, pero considerando sus alternativas realmente lo más sensato era rendirse.
Con bastante pesar, el grupo fue guiado hasta lo que Juan reconoció como El Pollo Feliz; el cual, al igual que todo el pueblo, contaba con un aire novedoso. Parecía más ahora un restaurante de alta clase que una simple pollería.

Al llegar al lugar, los hombres que los habían emboscado se quitaron sus máscaras, revelando al grupo completo. Entre ellos se encontraban Mariana- quien era el que se había llevado el disparo-, Carrera, Génesis, Robleis, Betra y Carola. Dios, enserio nada en esa dimensión podía verse menos intimidante, ni siquiera alguien tan agradable como Carre tenía un aspecto de no querer reventarte la boca a patadas.

Sintió un escalofrío de sólo pensar en lo que sería la imagen imponente del híbrido de oso. No gracias, realmente quería vivir.

Fueron guiados por el restaurante hasta una puerta de roble oscuro, encima de esta se leía "patrón" en letras doradas. Carola dio unos toquecitos a la puerta antes de recibir la afirmativa de ingresar.