Todo quedará en el pasado....

17 4 3
                                    

Mis sollozos los guarda la almohada de plumas que escondo bajo la cama, aquella que me ayuda a ocultar lo que siento. Los gritos de mi alma están deseosos de que el mundo los conozca, me invade un sentimiento de nostalgia inmenso, mi corazón se encuentra preso, tiene miedo a expresar lo que siente, no aguanta, ya no resiste, tantas balas consigueron acabar con la pasión que ahora no existe. Mi mente de ilusa quiere creer que todo va a estar bien, mis piernas decidieron detenerse, mis músculos se niegan a moverse, ya nada en mi cuerpo obedece. Es mi corazón el que manda; el que dice como debe ser. Mi mente impotente no sabe que hacer. Ya nada me convence, nada me apetece, pero la noche me ayuda a pensar en una cura, este padecer me ahoga, siento que mi ser se agota con cada gota de llanto que sale de alma y sin perder la calma decido pensar en lo que pueda pasar si decido detenerme. Ya no puedo continuar, siento que me voy a quebrar. Es mi sueño frustrado, más ha quedado ilustrado en este poema la pena tan grande que lleva mi ser en lo más profundo y que no existe clama para mí en este mundo. Necesito acabar con esto que escondo, liberarlo y que descubra el porque debía atarlo, me cansé de sujetar las cuerdas de mi vida, ya no espero que todo suceda como yo lo pida, cada cosa a su tiempo y en el debido tiempo podré caminar erguida y todo esto que he contado quedará en el pasado.

Kiria

La temperatura del corazón Where stories live. Discover now