Señorita Swift

Primer día de clase

(Narra Karlie, desde los pasillos de la universidad)

Dios, primera hora de la mañana y ya estoy sudando mares, estoy muy nerviosa por entrar a la universidad.
Eh..., tengo que ir al aula 33 para mi primera clase de Literatura.

- Hola, supongo que usted será la señorita Kloss. - me dice la que parecía que era mi profesora de Literatura, digo parecía porque es muy joven para serlo.

- Eh... Sí hola, siento el retraso. Me he perdido. -digo bastante insegura.

-Tome asiento, que no se vuelva a repetir.

- Descuide.

Me siento en el sitio que queda libre y todos me miran. Que vergüenza, el primer día y ya estoy llamando la atención.

- Hola a todos, soy la señorita Swift y este año les daré las clases de Literatura, encantada de conocerlos.
Me doy cuenta de que el chico que está al lado mía ha levantado la mano.

- Sí, dígame, señor Marin.

- ¿No eres demasiado joven para estar dando clase?

- Primero, no le he dado permiso para que me tutée. Segundo, su impertinencia le ha costado un castigo. Y tercero, mi edad no le incumbe.

Oh Dios, esta mujer es de armas tomar, respecto a la edad, yo le echo unos 23 años o así. Es rubia, con el pelo no muy largo, pero sí muy alta, y con unos hermosos ojos azules.

- Hoy haremos un examen de repaso de la materia.

Oigo como todos se quejan, incluida yo. ¿Repaso de la materia? Si ni siquiera recuerdo lo que hice anoche.

(Al día siguiente)

- Bueno chicos quería decirles que los exámenes de ayer no han salido muy bien.

- ¿Y qué se esperaba? -dije casi sin pensar.

- Esa respuesta por supuesto que no. -me miraba con esos ojos azules y con una sonrisa sarcástica a mi respuesta.

(Al terminar la clase)

Yo quedé sola en el aula con la señorita Swift. Estaba apunto de irme cuando me llamó.

- Karlie, espera, tengo que hablar contigo. - dijo con esa sonrisa dulce que tanto me gustaba, y que me producía mariposas en el estómago cada vez que la miraba. KARLIE, ¿TE ESTÁS ESCUCHANDO? NO PUEDES PENSAR ESO DE TU PROFESORA, ES UNA CHICA, ¿NO TE ESTARÁS ENAMOR...

- Eh... ¿Karlie? ¿Estás ahí?

- Oh, ¿ya la puedo tutear? -le suelto con una mirada de desprecio por los sentimientos que provocaba en mí.

- Solo si yo te lo permito... -me dijo susurrando cerca de mi oreja.

"Oh dios como vuelva a hacer eso no responderé de mis actos" pienso por un momento, ni siquiera yo sé qué me pasa.

- Solo quería felicitarte por tu magnífico examen, ¡felicidades!. -me extendió la mano tipo "enhorabuena".

-Gracias.

Cuando le di la mano algo me recorrió todo el cuerpo, nunca me había pasado con nadie, y menos con una chica.

- Eh... Karlie... Ya me puedes soltar la mano. - me dedicó esa sonrisa tan bonita.

- Eh sí claro, perdona. -me sonrojé mucho, lo noté.

- Bueno hasta mañana -dijo saliendo del aula.

- Adiós...

Ella era tan agradable y simpática conmigo... Estoy deseando ir a la universidad mañana solo para verla... ¿Pero qué digo? ¿Qué es lo que está pasando? Solo sé que cuando me mira siento cosas, cosas que nunca antes había sentido. ¿Estoy enamorada? ¿Enamorada de mi profesora? Es probable... Pero olvídate Karlie, ella nunca sentirá eso por ti.