Sé que tú golpeaste A Finn. -Dijo el moreno-

Moose empezó a ponerse nervioso mientras los demás no sabían que hacer.

Te dije miles de veces si te metías con él, te metias con mis nudillos -dijo Robin-

¡Cálmate! Solo fue una broma de amigos. -Dijo Matty-

¿Amigos? Claro, le rompiste casi todas las costillas, eso te parece amigos -Robin miro a Matty y lo empujo, haciendolo caer al suelo-

Moose quería golpear a Robin pero Robin fue más rápido y le metió un puño en la cara haciendo que este sangrara en los nudillos.

El Pelirrojo y el rizado estaban asustado.

¿Ustedes también quieren? -Dijo Robin-

No, ya nos íbamos. -estaban con miedo-

Robin miró a Moose en el suelo.

Tienes suerte de que no te asesino, porque sería capaz -Dijo el moreno y se fue todo enojado-

Moose tenía toda la cara sangrienta, mientras que Matty tenía un dolor en la espalda.

Robin llegó hacia la casa de Finney y toco la puerta.

Fue abierta por un señor de estatura mediana con barba y algo ebrio.

¿Qué quieres niño? -pregunto el Sr Blake-

Busco a Finney -Dijo Robin-

No está aquí -Dijo aún más ebrio-

¿No sabe dónde fue? -ya se estaba preocupando-

No, y no me importa -dijo el hombre-

Como puede decir eso. -Robin estaba muy triste-

El Sr Blake le cierra la puerta en la cara de Robin.

Arellano ya no sabía que hacer, así que decidió ir a su casa y pedirle ayuda a su mamá.

Robin entró a su casa y vio a su madre

Robin, que bueno que llegas, mira quien está aquí -Dijo la señora Arellano-

Robin vio a Gwen tapada con una sábana y a lado estaba Finney.

¿Qué pasó? -dijo preocupado-

Tuvimos un accidente en casa -dijo la menor-

Sí, algo así -Dijo Finney-

¿Por qué no me llamaste mamá? -dijo enojado-

No queríamos que te preocuparas y se nos hizo más sencillo esperarte -dijo la mujer-

Robin sólo miró y se acercó a Finney y Gwen.

Ya no quiero volver a mi casa -Dijo Gwen llorando-

Lo sé cariño, tenemos que tomar medidas con tu padre. -dijo la señora Arellano- 

Gwen no quería volver a su casa pero tampoco quería que su padre fuera a la cárcel por abuso, ella sabe que está mal, pero no quiere ver a la única familia que le queda o eso creían.

La madre de Robin preparaba comida y Gwen se había quedado dormida en el sillón.

Finney y Robin estaban en la recámara de Arellano.

¿Te sigue doliendo dónde te golpearon? -pregunto Robin-

No tanto -dijo el castaño-

Verás que todo se resolverá -Robin intentaba animar pero no servía tanto para eso-

Más que todo me preocupa Gwen, a ella le está afectando demasiado esto, a mí igual pero ella necesita a alguien que la cuide y yo no soy tan fuerte para eso -Dijo Finney triste-

No digas eso, tú cuidas demasiado a Gwen y ella de ti, y te adora, no habrá alguien más genial y mejor hermano que tú  -Dijo Robin-

Finney abrazo a Robin llorando.

No sabían que hacer, si su padre iba a la cárcel con quien iban a quedar, ¿iban a ir a un orfanato? Que es lo que realmente les esperaba en el futuro.

El Señor Blake se dirige a la casa de los Arellanos y toca fuertemente la puerta

¡Abran! ¡Sé que están ahí! -dijo el señor furioso-

Gwen se despertó asustada y la madre de Robin intentaba tranquilizarla

Robin, abre la puerta -dijo la señora Arellano-

Robin abrió la puerta con seguridad.

¿DÓNDE ESTÁN? -dijo furioso-

Usted no tiene nada que hacer aquí -dijo la señora Arellano

Son mis hijos, por lo tanto son mi responsabilidad  -dijo el sr Blake

Pues responsable no es, ¿cree que dejar a una niña golpeada es bueno? -La señora Arellano estaba enojada-

A usted no le importa como trate a mis hijos  -Dijo el Sr Blake-

Es mejor que se vaya, los niños no quieren estar cerca de usted -la señora Arellano lo dijo con firmeza pero el señor no hizo caso.

Mire, deme a mis hijos y olvidamos de que esto paso -dijo el Sr Blake-

La señora Arellano no los iba a entregar, ella sabía que no estaban en buenas manos.

Si no se va llamaré a la policía -Dijo la mujer-

Llamela. -dijo retandola-

Finney estaba asustado, la actitud de su padre no le gustaba.

Robin se dirigió a el teléfono y llamó.

Gwen no podía no evitar llorar.

Se escucharon sirenas de autos de policía rodeando la casa de los Arellanos.

Gwen miraba a su papá con mucho miedo, ella no quería regresar pero tampoco aceptaría que su padre estuviera en la cárcel.

Los policías entraban a la casa de la señora Arellano

Robin vio que Finney estaba asustado así que lo abrazó.

El señor Blake gritaba de que lo soltaran, pero la policía lo tenía agarrado.

Gwen sólo veía esa escena llorando mucho y la madre de Robin la abrazó.

Finney y Gwen sólo se preguntaron algo.

¿Con quién iban a vivir?

¿Dónde iban a estar?

-Lo que no saben es que tienen un familiar que está vivo.-

Hasta aquí este capítulo 😺

Hablaré más sobre la familia de Bruce y Vance, para que vayan conociendo también su desarrollo como personajes, también hablaré un poco sobre la familia de Robin <3






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