—¿No íbamos a desayunar? Desde que salimos sólo hemos estado viendo las vitrinas de las tiendas. —reproché, con una mueca.

—Lo siento, tienes razón.

Pasó una de sus manos por mi cuello, negué dejando un pequeño beso sobre sus labios.

—Vamos... —susurré entrelazando mi mano con la suya.

Ella me siguió gustosa. No tardamos en encontrar una cafetería bastante famosa cerca, había abierto hace no mucho y se volvió popular entre los universitarios.

En cuanto ingresamos al establecimiento la campanilla de la entrada suena, dando aviso a que llegaron otros clientes.


El olor a café es instantáneo y la música es suave, una de las canciones más antiguas del grupo SHINee se reproduce por los altavoces.

—Es bastante acogedor. —comentó la pelinegra, dirigiéndose a una de las mesas del final, justo al lado de las ventanas.

Era un día frío, la calefacción estaba prendida, dejándonos sentir la calidez del lugar.

—Es bonito, ¿verdad? —pregunta, sacándome de mis pensamientos.

—Cualquier lugar será bonito, mientras que estés conmigo. —le sonreí, guiñandole un ojo.— ¿Qué vas a pedir?

—Un café latte. —respondió sonriéndome.

—Muy bien, un café latte para la señorita. Ya vuelvo. —avisé para ir hacia la recepción a hacer la orden.

—Digame que desea... —dice el empleado al otro lado de la barra.

Él alza la mirada encontrándose con la mía y no puedo evitar sorprenderme.

—¿Kyungmin? —sonrió levemente.

—Park Sunghoon. —me llama por mi nombre, sonriendo.

—¿Aquí trabajas?

—Así es, quería una vida normal, ¿sabes? —meneó un poco su cabeza.— ¿Vienes solo?

—No.

Respondo, apretando ligeramente mis labios.

—¿Estás con Heejin? —pregunta curioso.

Asentí con la cabeza señalando con la mirada donde se encontraba la pelinegra, el siguió el recorrido con sus ojos, para después volver a mirarme.

—Eso es genial, en verdad les deseaba lo mejor, Heejin es una buena chica, nunca la vi juzgar mal a nadie, incluso a mi cuando-...

Lo interrumpí.

—Ella era demasiado inocente, no quería ver la maldad en las personas. Pero ahora es diferente, y tú igual, Kyungmin. Eres una buena persona.

El sonrió asintiendo repetidas veces, luego carraspeó la garganta y puso sus manos sobre la barra.

—Dime tu orden, podrían darme un sermón si sigo hablando con un cliente. Ya tendremos otro momento para hablar, Sunghoon.

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⏰ Última actualización: Oct 22, 2023 ⏰

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 ❝Vampires in the City❞||Park Sunghoon #2 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora