THE OTHER WEASLEY; Lucius Malfoy ✓

Extra 3

Rabastan sonrió y asintió. Se levantó de la cama y agarró a Beatrix en brazos.

—¿Quieres ver a la tía Roxy?—Dijo Rabastan viendo a Beatrix

Beatrix arrugó su frente, segundos después sonrió y se acomodó en el hombro de Rodolphus. Mary sonrió.

—Iré por la ropa, para irnos—Dijo Mary

[...]

Rabastan tocó la puerta por tercera vez, pero como las anteriores veces nadie abrió, nadie respondió.

A Rabastan se le hizo raro, pues cuando Roxane no podía abrir por lo regular gritaba que la esperaran un momento, y eso era en el segundo toque.

Rabastan volvió a toca y...nada. Rabastan empezó a preocuparse, aunque también le pasó por la cabeza que no estuviera en casa.

Iba a irse, pero levantó su vista y vio que la luz de la habitación estaba encendida. Ósea que si había alguien, Roxane era una persona que si salía se aseguraba de apagar todas las luces.

—A lo mejor no está—Dijo Mary

—No, Roxane apaga las luces cuando no está en casa—Dijo Rabastan buscando la llave en caso de alguna emergencia que tenía por ahí escondida

Una vez la encontró escondida entre las plantas que tenía ahí, la insertó y abrió.

Al entrar pudo sentir un ambiente diferente, sabía que no era el más alegre desde que había pasado lo de Lucius, pero ahora lo sentía más pesado.

—¡Roxy!—Grito Rabastan

—Shhhh—Lo calló Mary—Despertarás a Beatrix—

—Lo siento—Se disculpo Rabastan—Iré a ver allá arriba

Mary asintió y se adentró a la sala. Rabastan subió las escaleras y se dirigió a la habitación de Roxane.

Vio que la puerta estaba completamente abierta, se asomó pero no vio a nadie. Iba a irse pero por cosa del destino sus ojos vieron hacia la cama, arrugo su frente al ver que había unos sobres ahí.

Se acercó y sintió como su corazón comenzaba a latir demasiado rápido al leer para quienes iban las cartas. Volteó a ver a todos los lados, y entonces vio la luz del baño prendida, la puerta estaba casi cerrada.

Se acercó cuidadosamente, dio unos pequeños golpes a la puerta.

—Roxy—Llamó Rabastan sin abrir la puerta

Pero nadie contestó, otra vez. Volvió a tocar y nada.

—¿Estas bien?—Pregunto Rabastan

Rabastan trago saliva pensando si en lo que estaba a punto de hacer debería hacerlo.

—Voy a pasar—anunció Rabastan

Rabastan abrió la puerta cuidadosamente. Sus ojos se cristalizaron automáticamente al ver la imagen frente a él.

Era Roxane, pero estaba hundida en el agua. Reaccionó y se acercó rápidamente sacando a Roxane de la bañera.