Prohibido

EP11: Peligroso

-Si, claro.

-Vamos Gatito.

Yunseong no dejo que Minseo se apartara de su lado, él solo cargo a su ex escuchando su estruendosa risa. Al verlos de esa manera pocos creerían que esos dos adolescentes estaban por unir sus cuerpos esa tarde.

-Siempre supone que te gusta cargarme -Comento Minseo- ¿Pero no crees qué esto es demasiado?.

-No es demasiado, eres mi príncipe.

-Parezco una princesa.

-Una con un secreto en sus pantalones.

-Y luego estas diciendo que eres un caballero.

Ahora fue el turno de Yunseong en reírse, Minseo admiro al hombre que lo carga deseando tenerlo para toda la vida. Es egoísta, lo sabe pero quiere quedarse en este momento donde solo es felicidad.

-¡Minseo! -Grito una voz femenina.

-Sohee -Murmuró Minseo aterrado.

El pobre chico más joven se removió entre los brazos de su ex, Yunseong tuvo que bajarlo antes de que su amante se cayera y se lastimara. Desde el primer momento que se conocieron, siempre juro protegerlo y nunca dejaría que se lastimara.
No tuvo mucho éxito con su ruptura pero ahora que lo tiene de regreso, no dejará que se lastime.

-Espera, espera -Pidió Yunseong- ¿En donde me escondo?.

-No sé, solo hazlo -Dijo Minseo asustado.

Hwang sujeto la mano de su amante arrastrándolo hacia un arbusto,

-¿Q-que estas haciendo? Van a atraparnos.

-Solo deja que grite, volverá adentro cuando no te vea.

-No entiendes, me olvidé de algo.

-¿Qué?.

-Espera aquí -Pidió Minseo besando los labios de su amante.

Kim terminó empujando a Yunseong para ocultarlo más, sacudió sus prendas, acomodo su cabello y masajeo sus labios intentando que se vean menos hinchados. Se alejó lo suficiente del arbusto notando que su hermanita venía hacia él.

-Minseo -Volvió a decir ella- ¿A donde estabas yendo?.

-Quería ir a comprarme unos dulces -Mintió Minseo- Me estaba aburriendo ahí dentro -Volvió a mentir, con la compañía de su amante no había formas de que se aburriera.

-Bobo, en vez de irte así como así, avísame para no estar como tonta buscándote.

-Lo siento.

-Es mejor que te vayas por un largo tiempo.

-¿Y eso por qué?.

-Yunseong está aquí, no te lo encontraste, ¿Cierto?.

-No -Negó Minseo- En ningún momento me lo cruce.

-Perfecto, nos vemos en una hora.

-¿En una hora?.

-Si, así no te cruzas con él.

-Que sean dos.

-¿Qué harás dos horas en la tienda Minseo?.

-Ya me habré ido, pensé que podría caminar por la zona.

-Hmmm, de acuerdo, entonces nos vemos en dos horas.

-No mires mi ubicación, Kim Sohee.

-No lo haré, cuídate hermanito -Se despidió la menor besando su mejilla.

Minseo vio como su hermana menor volvía a entrar al establecimiento. Sintiendo como el sudor bajaba de su frente, suspiro agotado por las mentiras que dijo, estaba nada de volverse adentro y olvidar su calentura, pero unos brazos rodeándolo con mucho amor, consiguieron que su preocupación se esfume reemplazándolo en una sonrisa.

-Te amo.

-¿A qué viene esa repentina confesión?.

-Sé cuanto odias mentirle a Sohee.

-Yunseong.

-Tenemos dos horas, aprovechemos bien.

-De acuerdo, vayamos a ese hotel.

-No Gatito, tendremos una cita.

-P-pero...

-Tendremos otro día y sin límite de horario para volvernos uno.

-Tramposo.

-Lo soy.

-Pensé que te gustaba el peligro.

-Créeme, cada día sin estar a tu lado viendo como otro te besa me vuelve peligroso.

-Por esas palabras pienso que eres capaz de matar a Chang...

-Minseo -Lo llamo en tono de advertencia.

-A mi actual pareja.

-Soy capaz de hacerlo.

-No bromees porque juro que te señalare  como principal sospechoso si le sucede algo.

-¿Soportarías qué este en la cárcel? Gatito no tendrá besos, abrazos, ni mimitos, ni mucho menos las noches donde solo descansamos junto al otro.

-Eres de lo peor.

-Me amas igual -Murmuró en su oído yunseong.

Minseo no respondió pero Hwang puede ver la sonrisa enorme que tiene el más joven.
Los dos saben que es cuestión de tiempo para que los atrapen pero correrán el riesgo a pesar de lo peligroso que es.