Cap #01

55 8 14
                                    

Era una mañana nublada, no había ni una persona afuera, parecía como si el tiempo se hubiera congelado.

La única que se encontraba allá era una persona de cabello color (el que quieras) sin hacer nada productivo, pues no tenía a nadie y recientemente había perdido a su mascota.

Se encontraba sentada en la banca de un parque algo deteriorado, mirando sus pies, no parecía pensar en nada.

Seguiría así hasta escuchar el ruido de la lluvia cayendo.
Se puso de pie y fue a refugiarse bajo un pequeño departamento que desconocía. No tenía un carro o a alguien que le ayudara a irse a casa, la cual se encontraba a las afueras de aquella ciudad.

Miró por curiosidad la ventana que estaba a su lado, desgastada por la corrosión.

No se podía ver casi nada, así que pegó su rostro aún más a el vidrio, empañandolo con su respiración.

Con su mano limpio el cristal y entrecerrando los ojos logró ver dentro.
Había un espejo, un viejo sillón café y frente a este una mesita acompañada de una lámpara. El papel tapiz que cubría la habitación era un color algo... "Oxidado" con formas parecidas a flores.

es tan anticuado- pensaste

¿Acaso serán así todos los departamentos? - te preguntaste seriamente al ver la decoración.

La lluvia aumentó y pronto pasaría a una tormenta, lo cual sería aún peor para ti pues empezabas a debilitarte por el frío y quedarte a perder tu calor corporal no era opción.

Te hiciste a un lado del vidrio -ya empañado por tu respiración- buscando lo más pronto la puerta para poder tocar.

En el camino ves vidrios rotos regados por todo el suelo ^Los niños deben jugar muy seguido aquí, eh?^ pensaste al imaginar todas las cosas por las que había pasado el pobre cristal.

Apenas encontraste la puerta corriste lo más rápido que tus frágiles y mojadas piernas te permitían, una vez llegaste te paraste frente a esta, dudando si sería buena idea el tocar o no porque, ¿Qué pensarían de ti?

¿Darías una mala impresión al ser tan idiota sabiendo que lloveria, aún viendo el cielo gris?

Pensaste en inventar una excusa pero tú mente sólo pensaba en calentarse.

La sensación del granizo rozando tu espalda, sentías como perdías poco a poco la fuerza de tu cuerpo, tú débil y empapado cuerpo que dentro de poco no soportaría seguir de pie.

Demonios! La presión de tocar la puerta era más grande, tus sollozos, tus frágiles manos temblando y la palidez de tu rostro... Quizás si fingías ser la víctima de tan cruel clima el desconocido al otro lado te perdonaría...

Tocaste la puerta y te quedaste inmóvil esperando una respuesta, no pasó nada, volviste a intentarlo nuevamente con la esperanza reflejada en tus ojos, alguien tendría que escuchar tu sufrimiento o deberías dar media vuelta y buscar otra puerta que tocar.

¿Qué tal si sólo te ignora? Otra vez tu mente te enfocaba en todo lo malo en vez de lo bueno, como se supone lo haría cualquier persona.

Empezabas a enojarte, la fuerza con la que el granizo caía sobre ti aumentaba pero de cierta forma te ayudó a distraerte de esas ideas. Ahora, habías decidido quedarte y tocar la puerta aunque tus nudillos lo fueran a lamentar.

Para tu suerte alguien abrió...

Preguntaste con voz temblorosa si podías pasar, la persona enfrente tuyo no dejó escapar ni un suspiro y sólo se limitó limitó a tocarte el hombro para después jalarte suavemente hacía adentro.

- Oh, perdón por despertarlo, n-no era mi intención - Dijiste con un tono de voz quebrado, te daba pena mirarle a los ojos pero... Te dejó entrar a su casa, y eso significa que es amable? En todo caso, mirarlo a los ojos sería una señal de respeto.

Alzaste la mirada dudando de cómo te vería pero, él no te miraba con desprecio, o ¿Tal vez si?. Su mirada era apagada, sus ojos parecían cansados, como si aún tuviese sueño.

Su cara era "fina" sus pupilas hipnotizantes, su tez pálida y ese cabello tan blanco como la nieve... Su diferencia de tamaño era notable, probablemente unos 4 o 5 centímetros más alto que tu...

¿Estará enfermo? - Se preguntaba tu inquieta mente a sí misma. No era normal ver a a una persona con esas características.

Intercambiaron miradas, sentías como su falta de expresión te juzgaba, querías llorar de los nervios pero en un momento repentino el chico habló...

- Puedes.. quedarte en sofá, yo iré a mi cuarto.. -

Asentiste con una ligera sonrisa, el tipo te dio un pequeño empujón para que te sentaras y de paso te dio una manta para luego retirarse.

Te acurrucaste con la manta cubriendo tu cuerpo, sentías esa calidez y confort abrazandote como un amor maternal

Esa sensación te empezó a causar somnolencia, recorriste con la mirada la zona del espejo mostrada anteriormente, un montón de libros colocados en estantes y repisas. Cada rincón era habitado por éstos volviéndose común de ver.

Tu mirada continuó vagando hasta encontrar algo que finalmente llamó tu atención...

Una serie de libros con títulos un tanto curiosos se asomaban en la estantería.

Al parecer el tipo tenía interés por la psicología o era un psicópata que de alguna forma logró manipular el clima para secuestrarte en su departamento.

O podría ser de nuevo tu mente intentado analizar la situación. Pero, ¿Si de verdad fuera cierto y estuviera planeando algo en tu contra? Al menos morirías haciéndole compañía al tipo.

Tus ojos comenzaron a cerrarse lentamente, sin importar lo que realmente era ese chico, tenías demasiado sueño como para hacer algo más que no fuera dormir.

Te acomodaste nuevamente en la manta, abrazando el cojín del sofá mientras sentías como tu cuerpo se relajaba. Mañana la tormenta pasaría y quizás, por fin descubrirías los secretos de aquel muchacho de mirada inexpresiva...

* * * * * * * * * * * * * * * * * * * * *
•Créditos•
-Personaje Capítulo #01
"Christopher Pierre"/ "The Distortionst": GHOST

Colab: Moth-Fool, wynad_

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Jul 17, 2022 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

🙶Cristopher Pierre x Lector@🙷Where stories live. Discover now