San Lucas.

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POV Calle.

Jamás pensé volverme loca por amar a alguien. Jamás pensé si sería hombre o mujer. Jamás pensé si alguna vez alguien me amará. Jamás pensé en citas románticas, ni en como se sentía el corazón cuando te dan un beso.

Toda mi vida me había enfocado en tener el trabajo de mis sueños. Jamás creí lograrlo tan pronto. Ser la mejor fisioterapeuta de la ciudad no fue en vano.

Pero llegó un momento en el que me di cuenta que lo tenía todo, mi trabajo, mis estudios, mi clínica, mi casa...

Nunca había hecho algo en mi vida... tener pareja. Claro, había coqueteado con algunas personas en alguna fiesta pero... no pasaba más que eso... no me interesaba en el momento.

Y no me mal interpreten, no es que no crea en el amor, solamente siempre me enfoque en lograr mi objetivo en la vida. Veía las películas de amor pero no me imaginaba a mi con alguien, siempre decía "ya tendré tiempo para eso"... y si, ahora me creo capaz de compartir mi vida con alguien.

Y la encontré.

Nunca viví mi romance adolescente, pero con ella me siento en uno. Pareciera que no tuve que pasar mal rato con una que otra persona un tiempo... pero la vida me guardaba a ella para el momento indicado.

Antes de ella tuve como 100 citas fallidas. Nunca nadie me lograba convencer del todo, salí con un chico, era apuesto, alto, barba prolija, lucia encantador... pero el buscaba sexo y yo no. Luego salí con una chica, muy linda, pelirroja, era pintora y toda una amante del café... ella quería una relación poliamorosa y yo no. Decidí darle la oportunidad a un chico de mi clase que siempre buscó mantener contacto conmigo, me confesó que siempre le atraje, era muy tierno... pero el buscaba ya formar una familia y yo no.

Y ni hablar de la chica que solo salió conmigo para tratar de convencerme de hacer un trío.

Ahora me da risa como era todo antes de ella y a veces deseaba haberla conocido antes.

Pero llegó en el momento indicado...

Nos conocimos en una fiesta que nuestro amigo Sebas había hecho por su cumpleaños. Justamente Poché cruzaba el último año de su carrera como fisioterapeuta y Sebas le había contado de mi. Solo que antes que el se acercara a presentarnos ella y yo ya estábamos hablando...bueno, era una platica con algo de coqueteo. Yo solo le había preguntado si me daba permiso pues necesitaba que sue mueva para poder servirme un poco del trago que había en la mesa.

No soy una persona que se relaciona con tanta facilidad, tengo mis momentos... y ese fue uno de ellos, igual ayudaba mucho que ella si sabe entabla r una conversación sin problema y ahí es donde me di cuenta que igual debía poner de mi parte para que fluya.

Flashback *

-Andamos decididas esta noche eh.-dijo cuando vio que me serví un trago fuerte.
-Supongamos que si.-admití.

Sentía la mirada de ella en mi y vi de reojo su sonrisa.

-Me dicen Poché.-dijo estirando su mano hacia mi.
-Daniela, mucho gusto.-estreché su mano.

Algo sentí... algo sintió ella... que nos hizo quitar nuestras manos nerviosamente rápido.

-¿Eres amiga de Sebas?-preguntó ella antes de darle un sorbo a su bebida.
-Oh si, desde pequeños.-sonreí.-Supongo que tu igual eres su amiga.-dije obvia.
-Si.-rió.-Lo conocí en el gimnasio donde trabajo.
-¿Eres entrenadora?-pregunté sorprendida.
-Si.-sonrió.-Doy clases de entrenamiento funcional.

No te paro de amar. (Caché) Where stories live. Discover now