Love Circus

Prólogo

Hace años de la luna cayó una lágrima (piedra lunar) y de ella brotó un hermoso árbol dorado que se hizo más grande y frondoso que cualquiera, con su llegada los recursos naturales abundaron en la tierra y también se descubrió sus dones mágicos que los pequeños grupos decidieron aprovechar al arrancar sus hojas, flores, frutos y hasta sus raíces sin tener cuidado haciendo que pronto esté muriera al no poder con la demanda de los grupos así que cayó y sus últimas gotas de vida fueron robadas por diversos grupos para apropiarse de ella y así creando guerras que dejaron la tierra devastada.

Muy pocos seres habían sobrevivido, los elfos, duendes, orcos y más habían desaparecido por completo, ahora solamente sobrevivían los humanos y hombres bestia, casa grupo lo logro al trabajar en equipo. Pero los hombres bestia seguían sufriendo, muchas sub especies de ellos estaban a punto de desaparecer y era por el tema de no poder reproducirse porque sólo podían lograrlo con sus destinados, algo de lo que los humanos no debían preocuparse, además de que los híbridos se negaban al apareamiento con los humanos.

Los dragones fueron de los más reacios a cambiar, pero su población era muy poca y así tuvieron que ir cambiando y cediendo, pero el daño estaba hecho y no lograban recuperarse, más la magia se estaba acabando y el mundo estaba colapsando.

Uno de los pocos Alfas con su harem había logrado procrear seis hermosos dragones Alfas en los que todos ponían su fé.

Min YoonGi era el mayor de todos, un dragón negro.
Jung HoSeok el segundo mayor, un dragón amarillo.
Kim NamJoon el tercero, un dragón azúl.
Park Jimin como el cuarto, un dragón blanco y le siguió Kim Taehyung como el quinto, un dragón morado, habían nacido el mismo año con meses de diferencia.
Jeon JungKook como el sexto y último, un dragón rojo.

Cada uno conservando el apellido de su madre, en cuanto tuvieron la edad comenzó la búsqueda del harem para cada uno, pero ninguna mujer bestia o humana resultaba ser una destinada y eso comenzaba a desesperar a todos, no entendían como era posible que ninguno de los seis encontrará una pareja por lo menos. Comenzaban a resignarse.