Única parte

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Victor se encontraba con sus tres amigos Luca, Andrew y Edgar en su habitación. Los 4 discutían sobre cómo el cartero debía declararse ante Helena Adams, la mujer de la que se había enamorado profundamente desde hace muchísimo tiempo. Pues debía ser una manera discreta pero no apresurada, algo complejo y a la vez sencillo.

--¿Por qué no siemplemente le dices lo que sientes en una sola carta y listo? -preguntó el de cabello castaño oscuro, quería que su mejor amigo se atreva a ser más directo con su declaración-.

--Luca por favor, sabes bien que Victor no es esa clase de persona que da el primer paso tan rápido, debe ser algo menos apresurado -lo regañó el oji-azul, a él le preocupaba más que Luca no metiera la pata con sus consejos y arruine todo el plan-.

El rubio sólo se limitó a dar un suspiro pesado, quería mucho a sus amigos pero sentía que ellos entendían menos de estos temas que él, a ninguno de los 4 se les ocurrió algo...al menos no hasta ahora.

--¿Q-Qué tal enviarle cartas anónimas? -habló el albino, los 3 amigos lo miraron cómo sintiendo interés por lo que dijo- En la primera carta puedes escribirle algo bonito, como un poema o algo parecido que exprese un poco tus sentimientos por ella, en la segunda carta puedes escribir algo que describa un poco tu persona sin decir tan directo que eres tú, y en la tercera la citas en algún lugar lindo para que ella descubra quién le envió esas cartas, pues ella ya habrá sentido curiosidad por su admirador secreto desde la primera carta.

--Wow...no puedo creerlo...

--¿qué cosa no puedes creer? -preguntó el albino al oji-negro-.

--...que por primera vez hayas dicho algo inteligente. -obvio esto lo dijo en un tono burlesco-.

--¡LUCA BALSA! -exclamó el oji-azul, pues era muy intolerante a esas bromas, aunque tengan una gran confianza entre ellos no le gustaba que dijera esas cosas-.

Por otro lado el rubio se quedó pensando en lo que su amigo dijo, después de todo no era mala idea. Sólo debía planear cómo redactar correctamente todo y cómo enviarle las cartas a su enamorada sin ayuda de su amigo canino, pues si Wick se las entregaba levantaría las sospechas de Helena ya que el pequeño sólo enviaba cartas que su dueño le daba.

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Al día siguiente, Helena se despertó muy tranquila. Se arregló bien y tomó su bastón para dirigirse con los demás a desayunar, en eso, Tracy apareció frente a ella con una carta en sus manos.

--¡Buenos días Helena!

--Oh, muy buenos días Tracy -contestó la amable chica con tranquilidad-.

--Ten, una persona que pidió ser anónima me entregó esta carta para ti -extendió la carta hacia la castaña, mientras que la recién mencionada la tomó en sus manos- dijo que era muy importante que no descubrieras quién es antes de tiempo, por lo que no debes de pedir pistas o preguntar por quién es.

--Hmm...¿está bien? Gracias linda.

--¡No hay de qué! -y tan rápido cómo vino se fue, con una sonrisa emocionada-.

La castaña abrió la carta, para su sorpresa estaba escrito en Braille (escritura para personas ciegas) por lo que comenzó a leer la carta.

"Tu cabello es tan suave, como el tacto a las alas de un ave.

Tu hermosa sonrisa es tan cálida, que resalta en tu bella piel pálida.

Tu linda y tierna voz, hace que mi corazón palpite muy veloz.

💌•||Cartas anónimas||•🔮--One-Shot (Victor x Helena)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora