A veces tenemos que pedirnos perdón

90 5 2
                                    

Todos y cada uno de nosotros sabemos nuestros defectos y virtudes. Más allá de todo lo bueno que tenemos, también hay cosas que mejorar.
Y cada uno de nosotros llegamos a la conclusión de que sabemos donde están los fallos, donde cometimos esos errores que podríamos haber mejorado o incluso, llegado a cambiar si lo consideráramos.

Pero aún así, no debes olvidarte de todo eso que entregaste, de lo que diste porque las cosas fueran mejor, por mejorar tú y todo lo de alrededor.
Recuerda los detalles que tuviste de corazón. Todo eso que te salía sin que te lo pidieran y todo eso que te salía después de que te pidieran algo, que tampoco se puede adivinar todo.
Piensa en las veces que has intentado sacar risas o sonrisas. De esas veces que también has puesto tu hombro y has intentado ayudar a alguien cuando su mundo se caía a pedazos. ¿Sabes lo que vale tener a alguien que te escuche y te apoye a pesar de todo?

Hay un valor incalculable en lo que te dan las personas y recibes de ellas. Es bonito agradecer y darse cuenta de todo lo que han hecho por ti y tú también hiciste.

Y aprendes de cada enseñanza y lección que la vida te ofrece.
Así que tenemos algo pendiente. Es saber dejar de exigirnos tanto y pedirnos perdón en algunos aspectos.
Quizás en ocasiones la vida no nos ha hecho partícipes de momentos que quisiéramos vivir y otras, nosotros mismos nos lo hemos puesto difícil.

Por todo ello, hoy es hora de que te pidas perdón y veas todo lo bueno que hay en ti. Todo lo has hecho o hiciste. Cada cosa que te exigiste pero que igualmente salió como tenía que salir. Por cada vez que el estrés te comía las entrañas y los nervios te controlaban la vida. Pídete perdón porque a pesar de todo eres únic@ y tu esencia es el mayor regalo posible. Tu bienestar es muy importante y no debes olvidarlo. Perdónate y ámate mucho, mucho más de lo que lo pueda hacer alguien.

Muchas cosas por decirWhere stories live. Discover now