No odio a nadie pero te deseo lo peor.
Acarició suavemente la espalda de su fiel mascota Dumbo.
Se trata de un perro de raza bóxer, con su pelaje pinto y su mirada inocente.
Pero no fue la excepción y había una mujer loca en la casa.
- Sunno, te amo, lo siento
- ¿¿¿¿Estas loca????
- Fue sólo un incidente.
- ¿¿¿¿Tú piensas que soy estúpido???? es repugnante lo que acabas de hacer
Sus ojos se endurecieron con culpa, pero Sunno la miró con una expresión de disgusto.
- lo siento.....
- No, quiero morirme, tu existencia es inútil, una criatura repugnante como tú, eres repugnante.
- Sunno, no digas eso.
- Maldita sea, en que estabas pensando en tener sexo con el perro??????? ¿¿¿estas loca??? Necesitas un psicólogo???
- lo siento.
- No puedes arreglar nada con esas estúpidas palabras. Sabes que me voy de aquí. No quiero acercarme más a ti. Alguien como Dumbo solía ser importante para mí, pero ahora no importa si sigue así.
- Sunno, no me dejes.
- Vete, mujer asquerosa, fingiendo no saber, te odio, me arrepiento de estar contigo, es infinitamente repugnante. La próxima víctima será una anciana.
- Fue un error, lo siento.
- Eres el único error, siempre lo has sido
Tenía las mejillas muy mojadas, pero se lo merecía.
Ella solo era una tonta inútil para abusar de su perro.
