—¿Y como sabes cuanto queda en la cuenta de ahorros de tu mamá?

—El idiota es tan bruto que no cambió la contraseña electrónica, no le he terminado de quitar lo que queda por petición de Killien. Solo tiene quinientos mil euros y créeme cuando te digo que en menos de un mes ese dinero se lo habrá gastado en quien sabe que cosa— Explica— Belmont sabe que siempre guardo efectivo en la caja de mi despacho, mínimo seiscientos mil euros. Kam sabe de cajas fuertes desde adolescente, no le fue difícil convencerlo para robar el dinero y como recompensa darle un cuarto del botín.

—Se aprovechó del desespero de Kam por obtener otra vez dinero —Concluyo, asiente con la cabeza.

—Pero lo que no sabe es que se metió con el tipo equivocado.

—Kam volverá a prisión por los cargos anteriores y por estos que de le añaden ¿Pero que harás con Belmont?

—No es la primera vez que Belmont intenta robarme, quiso hacerlo hace un mes en la empresa pero es algo que me lo estaba guardando para cuando él volviera a atacar. Mostrar las evidencias que tengo y dárselas a la policía, hará que por fin ese imbecil se largue de mi vida. Su odio hacia mi por fin dejará de perseguirme.

Lo observo con sorpresa, él me guiña un ojo entendiendo lo que estoy pensando. No puedo evitar sonreír y decir mil veces que Sebastien siempre esta un paso por delante de los demás.

—Es muy inteligente Señor Abans.

—En la vida hay que ser estratégico señorita Villareal —Toma mi mano y deja un beso en mi dorso —Ahora ¿Probamos el nuevo jacuzzi que instalaron en el baño?

—Me parece un excelente plan— enredo mis brazos en su cuello y me eleva, enrollo mis piernas en su cintura y entre risas subimos la escalera.

Cuando dan las dos de la tarde bajo hasta la cocina con mi lapto y con una camisa de Sebastien puesta. Tomo una rebanada de torta de zanahoria y un vaso de leche, me siento en el taburete para empezar a trabajar en los diseños de la casa de Sebastien. Quiero que esta en especial tenga algo que vaya de acuerdo a su estilo.

Decido colores, espacio, muebles y la distribución muy bien alineados. De repente, una notificación aparece en una esquina de la pantalla anunciando un recordatorio.

Cumpleaños número 30
Sebastien Abans
14 de Septiembre.

Ay no. No, no, no.

¿Como se me pudo olvidar el cumpleaños de Sebastien?

Reviso el día en que estamos, primero de Septiembre. Faltan trece días para para cumpleaños, tiempo suficiente para buscar un regalo especial y planearle una fiesta con sus más allegados amigos.

Aunque pensándolo bien.

Además de Zeus ¿Sebastien tiene otros amigos?

Tomo mi teléfono y marco el número de Keyra, ella me podrá ayudar.

—¿Para qué soy buena?
—En trece días es el cumpleaños de Sebastien y necesito que investigues si tiene otros amigos aparte de Zeus.
—Malika, Sebastien no tiene amigos— Se ríe.
—¿Como estás tan segura?
—Soy periodista y he seguido la vida de ese hombre durante dos años sin descanso. Sus salidas entre amigos es solo con Zeus y Killien, en la empresa no tiene contacto con casi nadie.

Fue en ese momento que se me prendió el bombillito de mi cabeza.

—Christian Black y Stephen Miller.
—Son socios y colegas.
—Y lo más cerca que tiene Sebastien de amigos, contactalos y dile que les hablas de mi parte. Cuéntales que tengo planeado hacerle una fiesta íntima a Sebastien y que están cordialmente invitados a asistir junto a sus esposas.
—De acuerdo, haré lo posible para contactarlos.
—Quizás te cueste convencer a Christian pero no es imposible.
—Me dejas una tarea difícil.
—Lo sé pero sabrás arreglártelas muy bien.

El placer de Sebastien (M3) Where stories live. Discover now