Esos omegas

~[CAPITULO 1]~

Lan QiRen observa a los miembros ancianos del consejo que revisan las pilas de listas que guardaban la información de cada omega de las sectas, ya sea de las grandes o menores, hasta omegas fuera de ellas pero con familia de renombre, todo con el fin de seleccionar la pareja ideal de sus sobrinos. Claro que al final la decisión caería en los dos Jade, pero eso no evitaba que lo miembros mayores dieran un vistazo a los mejores potenciales.

Ya habían divido las mejores opciones y las descartadas, que aunque igual tendrían una oportunidad de participar en el evento no serian tomadas en cuenta como un prospecto para los hermanos Lan. QiRen le había dado el visto bueno a varios omegas siendo apoyado por los demás ancianos, estaban casi llegando a su fin cuando el hombre de barba noto una baja pila de papeles apartada de los demás.

—¿Ocurre algo con los omegas de esa pila?

Todos en la sala miraron la pila que señala.

—No hay nada malo — un anciano hablo para explicarle, QiRen alzo una ceja al verlo un tanto nervioso — son los omegas de Yunmeng Jiang.

Oh.

La comprensión fue clara en QiRen. Ahora entendía porque ni siquiera había sido revisada.

Entre los tantos misterios y secretos de la secta Lan así como sus reglas, hay una en particular que no es dicha al publico, solo manteniéndose entre los miembros.

No emparejarse con un omega de Yunmeng, mucho menos uno perteneciente a la secta Jiang.

Aquella regla tan detallada tenía una razón detrás.

Incluso si no se hablaba abiertamente, el mundo de cultivación reconoce que los omegas más fuertes vienen de la secta Jiang, cada generación más fuerte y hasta más salvaje que la anterior. Omegas incontrolables que rara vez se dejan dominar por un alfa.

No sabe como los crían, pero teniendo en cuenta que Yu ZiYuan es la actual señora del muelle del loto, no duda que esta nueva generación de omegas sea más dura e irascible que la anterior. Y es que la secta Lan tiene una especie de trauma con los omega Jiang que fue lo causante de la dichosa regla.

Hace varias generaciones atrás hubo un miembro Lan de la rama principal que se enamoro de un omega Jiang. El omega era hermoso como ninguno, lleno de gracia y encanto, pero tal como un omega Jiang este tenía una personalidad y actitud arrebatadora. Era el tipo de persona que desentonaba con la rigidez de la secta Lan, lo cual trajo demasiado problemas.

En la secta Lan los omegas deben servir a su alfa y dar cachorros, si era un cultivador debía dejar eso atrás para dedicarse a su familia, cada Omega Lan aceptaba esto y aquellos que se unen también, después de todo pese a lo que otros pensarían en realidad son tratados con respeto y amados, por lo que nunca se presento un problema de alguien en contra de seguir esa "tradición" hasta la llegada de ese omega Jiang en el pasado. Este rechazo la tradición sin dudarlo, alzo su voz en contra negándose a seguirla, incluso si amaba al alfa Lan ni siquiera su amor por el lo persuadió por cambiar su opinión. Luego de eso hubo un enfrentamiento en que las sectas Jiang y Lan estuvieron cerca de entrar en conflicto, por suerte eso pudo evitarse y hasta la fecha ambas sectas mantienen paz entre si.

No se sabe con certeza que paso con el Alfa Lan y el Omega Jiang, además de que este ultimo jamás cambio su pensamiento. Algunos dicen que ambos escaparon juntos y no se les volvió a ver, otros que el omega sin poder jamás aceptar la "tradición" se marcho dejando atrás al alfa que desconsolado por esto entro en reclusión y paso ahí el resto de sus días.

Por eso hasta la actualidad no han hecho acuerdos entre ambas sectas por una alianza matrimonial, a diferencia de con otras sectas. Repetir la historia del pasado que casi desata una batalla entre ambas sectas es lo ultimo que quieren.

Mejor prevenir que lamentar. Piensa QiRen tomando aquella pila con los omegas de Yunmeng, echándole solo un vistazo por curiosidad. No habían muchos, menos de cinco, lo cual era una suerte.

Entre esos pocos no había posibilidad que sus sobrinos pusieran su atención en alguno ¿no?.

Eso seria tener muy mala suerte.

Por otro lado, lejos de la secta Lan, en el territorio Yunmeng, a orillas de un muelle Jiang cheng y Wei Ying se despiden de su familia.

—¡Demuestren con orgullo a la secta Jiang y a los omegas! — fue la severa voz de Madame Yu, una peculiar forma de despedirse de ambos menores

—¡Lo haremos! — exclamaron ambos al unísono, alzando un puño al aire ya dentro del barco

Madame Yu sonrió satisfecha, a su lado Jiang FengMian movía la mano en el aire con tranquilidad despidiéndose de sus dos hijos. Yanli al lado de sus padre imitaba su gesto con una sonrisa cálida.

Ambos hermanos se miraron de reojo y esbozaron una sonrisa. Una grande y amplia por parte del de lazo rojo en el cabello y una ladeada por parte del de túnica morada, esperando con emoción e intriga lo que les espera.