Los Alfas de la Reina

CAPITULO 2

Se había decretado una semana de luto en todo el reino, pero el reino tenía que tener un monarca nuevo lo más rápido posible y esa era yo, mis padres nunca tuvieron un hijo, solo dos niñas, por lo tanto al ser la mayor sería la nueva reina de Agder.

Habían pasado cuatro días desde la muerte de mis padres y la única pista que había era unas huellas ensangrentadas hacías el armario, donde se encontraba el pasadizo secreto, al ser un castillos antiguo había pasadizos por todos lados, hasta en mi habitación y solo los guardias y la familia sabían de ellos, pero cuando entraron al pasadizo ya no había huellas, el asesino debe de haberse dando cuenta y se saco los zapatos.

El reino de Agder es conocido por la guardia Alfa, son un grupo de guerreros tan silenciosos y letales que sus oponentes no los ven venir, cada miembro de la familia se le otorga un grupo de cinco para cada uno al cumplir 18 o al asumir el trono, mi padre tenia a los mejores guerreros alfas de todos los tiempos según las historia, y aun así ninguno escucho nada y todavía no han averiguado nada.

Seré mujer, pero no idiota, no han querido decirme nada y cuando lo hacen se que ocultan información, por eso empece a investigar por mi cuenta, pero ahora tengo al consejo encima mio y no puedo escabullirme, tengo que manejar un reino y para eso tengo que ser coronada pero estos malditos no me quieren dar la corona hasta que me case, pero eso no va a ser así, por eso en este momento me dirijo al piso secreto del castillo, donde esta la guardia Alfa.

Al ser un secreto real no pueden estar con los guerreros normales, aquí abajo tienen todo lo que necesitan como una gran armería y un gran salón de entrenamiento, ademas de acceso a casi todos los pasadizos secretos, mi plan al venir hasta aquí es ver si alguno vio algo en los pasadizos la noche que mataron a mis padres y elegir a mi guardia personal, en realidad mi guardia la elige el jefe de la guardia de mi padre, pero no confió en el y prefiero elegirlos yo misma.

Al llegar al gran salón de entrenamiento hay por lo menos 50 guerreros de todas las edades, ordenadas en cinco filas perfectas.

-Bienvenida su alteza princesa Nix- dijeron todos a coro haciendo una reverencia.

-Ya deben saber por que estoy aquí, pero le voy a pedir a los que tengan entre 20 y 18 se queden y el resto puede retirarse- a los segundo solo quedaban unos 20 chicos, pero mi vista se dirigió a un grupo de 5 en el fondo del salón, con solo verlos supe que eran ellos.