— Creo que no es necesario el matrimonio – ellos me miraron como si hubiese dicho alguna locura – hay mas clanes que estarian dispuestos a unir fuerzas sin necesidad de un matrimonio .

— Irina – el tono de mi padre era severo – haras lo que se te ordene y ni se te ocurra hacer algo a mis espaldas . Ahora retirate .

Sali de ahi con toda la elegancia del mundo por dentro estaba llena de rabia .Mi propio padre me habia amenazado asi que debia andar con cuidado,era su unica heredera .En vez de celebrar una boda él seria capaz de celebrar un funeral .

No era la indicada para decirles a Dante y Luke que ahora podian elegir con quien casarse siempre y cuando beneficiara a los reyes . Para su suerte el clan Liu tenia dos hijas ya casadas y los Wang tambien eso quedaba en cero candidatas para ellos .

Mark no hizo preguntas me llevo a casa para que pudieramos cambiarnos y recibir a los invitados mis futuros suegros.

Como siempre Giana Lenkov habia dejado una caja con mi vestido y todo lo que debia usar esa noche ,una cosa de la que preocuparme por el momento.

— Princesa tenemos que bajar – era Mark – Lee llegara en cinco minutos .

Respire hondo y conte hasta tres para calmarme ,sin errores. En el pasillo estaba él con un traje negro .

— ¿Algo que deba saber? – pregunte .

— Debes ser amable , nada de alcohol y estare a tu lado todo el tiempo – tomo la palma de mi mano y escribio en nombre de Evan – Sin errores princesa.

Tal y como habia dicho mi primo la familia Lee llego Cristopher Lee y su esposa Emma acompañados de sus dos hijos Nicole la mas joven y Kris . Mi madre dio ordenes de llevar su equipaje a sus habitaciones .

Con el paso de las horas empezaron a llegar los demas invitados como niña buena me quede cerca de mis padres para saludarlos . Sabia que alguien me observaba cuando di con él levanto su copa en mi direccion al parecer Lukas y Dante se estaban divirtiendo supongo que aun no saben nada .

Por el momento era la única que estaba al tanto de mi futuro compromiso porque Ava Volkov se comportaba todo lo opuesto a mi nadie la vigilaba hablaba con todos. Apesar de que crecimos juntas siempre hubo rivalidad. Tenía el poder que ella soñaba sabía perfectamente que sí ella se iba no tendría nada cuando se fuera en cambio yo seguiría teniendo poder por ser heredera y por parte de mis futuros suegros.

Tenía que pensar fríamente sobre cómo debía tratar con Kris y Evan.

—Zhang ya llegó –la voz de mi primo me sacó de mis pensamientos.

Ahi estaba él haciendo su entrada del brazo venía con una chica. Me acerque hasta ellos para darles la bienvenida.

—Buenas noches y bienvenidos –les salude.
—Esta noche luces hermosa –dijo –¿No vas a presentarnos a tu acompañante ?
—El es Mark Lenkov –le señale – mi primo.

Mark estrecho su mano con Evan aunque ya se conocían.

—¿Y tu eres ? – le pregunto a la chica mientras dejaba un beso en su mano.

Este no era el momento para coquetear con la mujer de otro.

—Me llamó Rachel Zhang –se presentó ella.

El tonto de mi primo no dejaba de mirarla, esa chica era del clan Zhang.

—Mi hermana pequeña –dijo Evan.

No entiendo como pudo traerla si este lugar está lleno de cazadores.

Los jefes llegaron y muy educadamente mi primo y yo nos retiramos.

—Ella no existe esta noche – le dije a mi primo.
—Es hermosa... –creo que el se dio cuenta de su error –Nada de tonterías lo tendré en cuenta.

Por ahí venía Ava copa de vino en mano, alguien debería controlar a esta niña.

—Ahí viene la competencia –comentó Mark–se amable.
—Pensaba que Kris Lee era la única sorpresa de la noche pero me equivoque también nos honró con su presencia Evan Zhang – sabía que por su tono quería averiguar más cosas.
—Ya conoces a los reyes siempre nos sorprenden – me reí.
—No te ofendas Mark ellos son más guapos –dijo Ava.
—Las chicas del clan del Este son más guapas –esto lo dijo para molestarla.

Sabía que quería matar a Mark por su comentario. Por años se esforzó por llamar su atención y él pretendía que no existía.

—Vamos a divertirnos un poco –sugerí –Somos amigos.

Fuimos hasta la barra ella pidió un Martini y nosotros agua con hielo. Ella nos miró raro. Minutos más tarde Dante vino a por ella para que no hiciera un escándalo.

—¿Porque dejaste que bebiera? –preguntó Dante.
—Ella olvidó el protocolo, además estoy tomando agua.

Durante el resto de la velada todos charlaban o me preguntaban por mis estudios siempre respondía con cortesía.
Por unos instantes sabía quién me miraba porque resultaba incómodo busque a Janov pero no era él. Le pedí a Mark que mirara por mí así no levantaría sospechas con mi padre.

—Los clanes del Este tiene puesto sus ojos en ti –mientras se llevaba un canapé a los labios.


La cacería había empezado esta vez yo era la presa.

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