Único

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La última pizca de cordura que pudo haber tenido ese momento desapareció con tan solo unas palabras.

"El joven maestro Wei murió Wangji, lo siento".

Ni todos los látigos que fueron marcados con sangre en su espalda fueron tan dolorosos como aquellas palabras.

Después de dar tal noticia el Jade mayor salió de la sala de confinamiento de Wangji no sin antes tocar su hombro en señal de apoyo junto a un suspiro, la mirada de su pequeño hermano se había apagado. Se retiro pensando que lo mejor era dejarlo solo y así pudiera asimilar tal noticia con la intención que algún día pudiera superarlo.

Nunca dejará de arrepentirse cuanto estuvo equivocado, nunca dejará de arrepentirse de haberlo dejado solo en ese momento. Pero su ignorancia le había ganado creyendo que conocía lo suficiente a su pequeño hermano.

Sosteniéndose de ambas manos y aun con el ardor recorriéndole dolorosamente toda la extensión de la espalda Lan Wangji intento levantarse tan solo para conseguir estrellarse en el piso cayendo de la cama de donde se encontraba recuperando de sus heridas.

"Confinamiento"

Siendo alguien que era considerado disciplinado y correcto, siendo la imagen de la elegancia y la rectitud en persona. Jamás renegaría de cada una de las acciones que lo llevó a ese lugar, aún si eso le había quitado toda la alabanza que tan solo su sola presencia ocasionaba.

No se arrepentiría, jamás lo haría, lo llevaría con orgullo porque significaba que había defendido hasta el final a su persona amada.

Quería gritar.

Porque a pesar de levantarse contra su secta yendo en contra de las reglas que lo criaron, haber alzado su espada ante aquellos discípulos que eran de su misma secta, nada fue suficiente porque el mundo se había empeñado en arrebatárselo de igual manera. Creyó que su castigo había terminado con esos crueles treinta y tres latigazos en la espalda por cada uno que había herido casi a muerte, si hubiera sabido que no sería suficiente, hubiera preferido huir con su Wei Ying o ser al menos la última persona que vería su alma gemela antes de dejar este mundo.

¿Por qué a pesar de todo lo que hizo termino de esta manera? Se sentía tan solo de nuevo. Se suponía que hizo todo esto, acepto todos los castigos de forma sumisa para que él siguiera viviendo.

Pero todo fue en vano, no debió dejarlo en su estado.

De nuevo lo habían abandonado al igual que lo hizo su madre.

— No le creo, no puedo creer eso, no puedo.

Wei Ying...

Wei Ying...

Pronunciando su nombre con dificultad, una y otra y otra vez ignorando el insoportable sentir del abrir de sus heridas ante cada movimiento brusco que hacía se arrastró hasta donde estaba Bichen que se encontraba tirado en una esquina. Soltando un gruñido y con su fiel arma en manos comenzó a levantar la parte de su torso despegándola del piso con una sola idea en mente "Llegar a los túmulos funerarios y comprobar con sus propios ojos si aquellas palabras que destruyeron su mundo eran en verdad ciertas"

Huyó de Cloud Recess en plena madrugada terminó llegando al amanecer al lugar donde lo había visto por última vez. Con la respiración agitada con gotas de sudor deslizándose por su frente y sin saber de dónde consiguió las fuerzas suficientes entro corriendo a la cueva donde lo había dejado la última vez.

Se detuvo de golpe con los ojos completamente abiertos de la impresión.

Lo vio.

Se acercó a pasos lentos.

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⏰ Última actualización: Apr 16, 2021 ⏰

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Te amo Wei YingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora