El club de los rechazados

Diario Pao (Maratón 3/3)

Tal vez fue su compresión lo que me impulsó a contarle lo de mi hermana. Fue raro pronunciarlo en voz alta cuando jamás a lo había hablado con nadie. Es lo único de lo que jamás me siento preparada para hablar. Supongo que siempre llega una persona a tu vida que se convierte en tu excepción, con la que hablar de lo que guardas en tu pecho deja de ser tan complicado. Emiliano es mucho más maravilloso de lo que soñé, convierte la rutina en mi cuento de hadas. Encuentra la manera de transformar el simple hecho de empaparse en algo emblemático. No hay momento que no fuera perfecto en este viaje. Es ese esfuerzo por hacer feliz a los que ama lo que más adoro de él.

Aurora se muere por conocerlo, no sé cómo logra sacarme los detalles, pero cuando hablo con ella siento como si una piedra enorme despareciera. Me supera en ser una romántica, bastante grave. Desde que le conté lo del bar prácticamente lo nombra a diario, estoy convencida de que antes de terminar me llamará para conocer toda la verdad. No me molesta, todo lo contrario. Soy afortunada por tener una amiga que quiera escucharme.

En realidad, gozo de mucha suerte en general. Tengo una familia que me ama, me apoya e incluso cuando no me entiendan siempre intentan estar para mí, hoy lo comprobé. Papá me ha dicho que estuvo mal irme sin avisar, pero se le ha pasado apenas le mostré lo que envié. Creo que entendió que no solo me gusta escribir, sino que es lo que más amo, después de ayudar a los animales. Valió la pena su enfado a cambio de la sonrisa orgullosa que me dedicó. Así es él, se hace el duro, pero es dulce como un algodón de azúcar.

Mamá dice que heredé parte de su carácter.

Claro que eso no se lo dije a Emiliano, no por mala, aunque siendo honesta disfruté de sus nervios al conocerlo, sino porque no me dio tiempo. Nunca me pasó por la cabeza que querría hablar con ellos. Un acto innecesario, pero que valoré por su significado. Emiliano siempre quiere ayudarme, incluso cuando eso lo meta en líos. Pudo marcharse a casa, nadie lo retenía, ni le reclamaba, pero improvisó una conversación sincera que desarmó a papá.

No lo dijo, para ser honesta no hizo ningún comentario referente a Emiliano, fue como si se obligara a ignorar su visita. Eso es un buen síntoma, su silencio se traduce en su falta de queja hacia él. Pronto olvidó el enfado, que se avivó un instante durante la cena, por las bromas de mi hermano que no dejaba de repetir que su dulce Pao había dejado de ser una niña.

Por otra parte mamá no dejó de hablar sobre él cuando nos quedamos sola. Ninguna novedad teniendo en cuenta que incluso estando presente no resistió para soltarme entre labios, alzando un pulgar: ¡Ese es el bueno!

No sé si él sea "el bueno", pero sí que su presencia me reconforta y me ayuda a ser una mejor persona. Emiliano hace que olvide esas tonterías que rechazo de mí misma. Y él me ha dicho que también mi compañía le ayuda, en realidad me ha dicho cosas demasiado bonitos para resumirlas en algunas líneas. De todos modos, no necesito escribirlas, se encuentran grabadas en mi corazón.

Ahí está la llamada de Aurora, justo después de un diplomático mensaje que empieza: Cuéntameeeeeeeee. Seguido de treinta mensajes con mi nombre, así que será mejor que deje esto aquí si no quiero que el servicio de telefonía me demande.

Además, tengo que dormir temprano porque Alba me invitó a su prueba de vestido. Estoy tan emocionada de ver todos los vestidos de novia. Creo que fue muy buena acordándose de mí para sus planes. Es una mujer tan valiente, se merece tener una fiesta a la altura. No hay nada más romántico que una boda, a excepción de amar a alguien con todo el corazón, ¿puedes creer que tendré la fortuna de vivir las dos?

Espero les gustaran los capítulos ♥️. La próxima semana veremos al club ♥️, no se lo pierdan lo que viene ♥️😉. No olviden dejar en los comentarios si les gustó el maratón y si tienen alguna canción que les recuerde a la historia ♥️. Mil gracias por su apoyo.