Rincón sebaek

𝔄𝔐𝔄𝔗𝔈𝔘ℜ𝔖 𝔇𝔈 𝔖𝔄𝔑𝔊 [ᵃᵈˢ]

Dos amantes nocturnos. Dos traidores. Dos criaturas de la oscuridad. Dos seres llenos de pasión y amor por el otro.

El viento soplaba con fuerza y era lo único que rompía con el silencio casi ilegal de la noche.

Muy al fondo de los árboles, en el lugar más escondido, había una gran casona. Por las ventanas se veía la tenue luz de las velas.

En la habitación más grande de la casona, ambos hombres peleaban, con la mirada fija en el otro, en un reto que ninguno quería perder.

- ¿Cómo mierda se dieron cuenta de él?

-No lo sé, idiota. Acabo de contarte todo lo que sé.

El más bajo se acercó y agarró por el cuello a su amante.
- ¿De verdad estás jugando a esto, Sehun? ¿Realmente así de fácil es para ti rendirte? No jodas, por favor.

El pelinegro agarró las muñecas del bajo y las sacó de su cuello. -He hecho todo lo que ha estado a mi alcance, Baekhyun. No puedo hacer más que otorgarles un escondite hasta que él cumpla la edad necesaria.

- ¿Necesaria para qué, Hun? ¿Para convertirlo en estas mierdas que somos tú y yo? No quiero que pase por eso.

-Es la única manera, Baekhyun, yo...

- ¡Es nuestro jodido hijo, por el amor de satán! ¡No le haré semejante cosa!

Sehun miró a su amante, para después pensar seriamente el asunto. La cara de su jodido jefe y rey pasó por su mente. Estalló.

-Mira, Baekhyun, también es mi hijo, también para mí es jodidamente difícil, ¡Jodida y malditamente difícil! Pero prefiero a esconderlos a ambos, a ti y al bebé, que presenciar la muerte de ustedes. ¿Te quedó claro?

Ambos ojos se encontraron. Lágrimas rojizas se asomaban por los ojos del pelicafé.
Baekhyun no aguantó el llanto y se estampó al torso de su amado.

- ¿Por qué, Hun? ¿Por qué seguimos pagando por errores que ya dimos por purgados?

El alto simplemente hundió la cabeza en el pálido cuello de su pareja y aspiró. Todavía sentía el olor a rosas recién cortadas que Baekhyun había puesto en la mesita de noche.

Hundió un poco más su rostro y pasó la lengua por la delicada zona. La marca que reflejaba lo que le pertenecía seguía ahí, intacta.

-Cariño, amor... -Decía Sehun, mientras que Baekhyun seguía apretando su abrazo- Amado mío...

A veces Baekhyun sólo se sentía a salvo con Sehun sosteniendo su cuerpo y teniendo el rostro hundido en su cuello. A veces eso le daba tanta tranquilidad.

Hun alejó un poco el rostro para verle la cara a su amante. El bajito desvío la mirada rojiza, pero su barbilla fue levantada.

-Haré lo mejor posible para que estés a salvo. Tú y el bebé. Créeme que mataré hasta al mismísimo rey para hacerlo y no dudes de ello.

[⛓]

Había pasado casi un mes desde la discusión y ambos sabían que el día se acercaba.

Sehun estaba besando y lamiendo muy lentamente el cuello de Baekhyun, como si fuera lo más preciado y delicado que tuviera en su poder.

-Temo tanto perderlos a ambos, amado, que a veces respirar se me hace difícil.

Baekhyun suspiró al escuchar esas palabras. Habían momentos en que le aterraba tener tanta conexión con su pareja.

-Hun, cariño, sólo... sólo disfruta esto un poco más, ¿sí? Antes de que se escurra por tus manos.