Frágil

198 6 1
                                    


El calor era insoportable en aquellas lejanas planicies y el viento arrastraba a su paso enormes volúmenes de arena, dificultando aún más la complicada travesía de la pequeña Viximon. Las grandes columnas de información que se vislumbraban en el horizonte y la imponente visión de la red de datos sobre el cielo de aquel lugar, dejaban muy en claro que aquel sitio no podía ser otro sino el Digimundo.

Después de vencer al verdadero enemigo, y cerrar las fronteras entre el mundo real y el virtual, había regresado a ese sitio hostil, junto con los otros digimons que lucharon contra el D-reaper.

Despedirse de Rika fue un golpe duro, pero cuando el momento del adiós llegó, se mantuvo firme y sonrió para su compañera una vez más, aun cuando para la niña había sido imposible contener sus lágrimas. La pequeña criatura solo pudo prometer a su camarada que se volverían a encontrar, mientras su pequeño corazón no terminaba por aceptar lo que estaba pasando, antes de desaparecer en la niebla.

Después de eso, todo estaba difuso. No podía recordar con exactitud cómo llegó al Digimundo. Cuando despertó simplemente era de noche, le dolía la cabeza y tiritaba por el frio. Después de dar un vistazo, se dio cuenta de que no había nada a su alrededor más que arena y no pudo encontrar a ninguno de sus amigos. Se puso en pie rápidamente, la pequeña zorra no era ingenua, sabía que tenía que moverse pronto, para evitar convertirse en la presa de alguien más, corrió tanto como sus pequeñas patas se lo permitieron, tratando de rastrear en el aire el aroma de los demás.

No lo logró. Y ya habían pasado días después de eso.

Lamentablemente, había vuelto por alguna razón a su etapa infantil. Y por más que lo intentaba, no lograba digievolucionar. Habían pasado varios días desde que comenzó a vagar. Y las esperanzas de encontrar a los demás poco a poco se desvanecían, sintió miedo de que los otros hubiesen corrido con peor suerte que la suya y en este momento no fuesen más que retazos de información vagando en el horizonte entre ambos mundos. No. Aquello no podía ser verdad. No debía pensar de esa manera tan pesimista, aún tenía una promesa que cumplir y se aferraría a ella a toda costa, se mantendría con vida, encontraría a sus amigos y juntos buscarían el camino de vuelta al mundo real.

Continúo con su travesía, sin rumbo fijo. Esperando llegar al final de ese interminable desierto, a paso lento pero presuroso.

Cuando la transición a un nuevo día se encontraba cerca, divisó a la distancia una gran formación rocosa, a la que se dirigió sin pensárselo dos veces.

Sentía a cada paso que daba, que las fuerzas le fallaban y que el hambre se hacía cada vez más insoportable, pero la ilusión de haber encontrado un refugio del calor inclemente, le dio la suficiente motivación para continuar.

Sentía la frustración de sentirse atrapada en su primera etapa evolutiva, y la idea haber perdido absolutamente todo el progreso que había logrado junto a Rika, la aterraba. No sabía si podría andar el mismo camino nuevamente, no sola. Pero necesitaba volverse más fuerte lo antes posible, si quería encontrar la manera de volver al mundo real, tenía que lograrlo.

Con dificultad logró llegar hasta el gran peñasco rocoso, que prometía un descanso seguro. Entre las paredes de piedra, encontró una pequeña obertura que le daba acceso a una oscura cavidad. Haciendo uso de su agudo olfato, logró descartar la presencia de posibles amenazas, y se adentró en la frescura que la húmeda roca le brindaba.

xxxx...xx...xxx...xxx...xxx...xxx...xxxx...xxx...xxx...xxx...xxx...xxx...xxx...xxx...

-¡Dense prisa, aquí huele a Terriermon! – Gigimon, corría tan rápido como podía, agitando su cola roja de un lado para otro, mientras era seguido de cerca por Calumon, Monodramon y MarineAngemon.

Ai ajuns la finalul capitolelor publicate.

⏰ Ultima actualizare: May 14, 2020 ⏰

Adaugă această povestire la Biblioteca ta pentru a primi notificări despre capitolele noi!

Situaciones - Impmon x Renamon - DigimonUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum