III

626 100 0
                                    

Sé como eres, conozco tus mañas y costumbres, quizá sé más sobre ti que de mi mismo, pero no es algo de lo que deberías sorprenderte Julio, después de todo fuimos pareja por un muy largo tiempo.

Por eso tenía una idea de donde estarías, ese valle donde soliamos ir cuando nos quedabamos en mi país, un bonito lugar en Atacama, con el cielo azul, y el pasto verde, como ya pocos lugares quedan.

Recuerdo claramente como nos quedabamos por esas zonas a pasar tiempo juntos, o cuando queriamos pensar, recuerdo verte durmiendo bajo el bello cielo y me recuerdo a mi mismo sonriendo como un weon por su pololo.

Analepsis

-Julio, quiero dormir contigo hoy, vuelve a la casa.

Pero tu no escuchabas, estabas tan perdido en las estrellas y en la luna, que me preguntaba si seguirias en este mundo realmente.

-Julio, vuelve a la casa weon, o te vas a resfriar.

-Manu, ¿crees qué podriamos viajar a la luna?

Tus ideas locas y soñadoras solían confundirme, porque así eres tu, alguien con tantos sueños y metas, pero con miedo de saber si realmente podrías hacerlo.

-¿De qué wea me estas hablando Julio? ¿Otra vez infiltraste tu cerveza a mi país y andai' tomando?

Te pregunte sonriendo a la vez que me sentaba a tu lado para hacerte compañia.

-Birlocha de mierda, te estoy hablando en serio.

Me dijiste con una sonrisa y supe que serías capaz de lograr lo que quisieras si solo te tuvieras un poco más de fé.

-¿Por qué quieres ir a la luna Julio? ¿No te basta la tierra estando conmigo?

-Sabes que soy muy feliz aquí, contigo chileno tonto.

-¿Entonces?

Pero acostumbrabas a soñar tan alto, que a veces me preguntaba si realmente estabas feliz con lo que teníamos, si cuando abrieses tus alas realmente me llevarías contigo.

-Por eso iremos juntos Manu, tu y yo ¿no sería genial tocar las estrellas juntos?

Y mientras extendias tus manos hacía el cielo, supe que era todo lo que necesitabamos, mientras besaba tu cuello cariñosamente y tu reías, supe que no tendría que buscar el cielo, porque tocaba las estrellas contigo a mi lado.

Caminé hacia el valle, y te vi a lo lejos, sentado como aquella vez mientras veías al cielo, con los mismos ojos soñadores que tenías aquella vez, con los brazos extendidos al aire, como si pidieras que te llevara, pero esta vez yo no estaba junto a ti para abrazarte y repartir besos cariñosos en tu cara y cuello, para oír tu linda risa, o para simplemente recordarte que fuese donde fuese que tuvieras planeado ir, debías llevarme contigo.

Y me aleje mientras veía tu silueta pararse y caminar, me aleje para que no me dijeras que ya habian terminado tus planes de soñar conmigo incluido, porque quería seguir pensando que aún eras tan mio, como yo seguía siendo tan tuyo.

Manteniendo esta tóxica relación, que no te permite avanzar, y nos lastima, porque ninguno quiere dar el primer paso al perdón, porque ambos somos tan orgullosos que no lo haremos, pero yo no te dejaré alejarte demasiado de mi, como tu no me permites olvidarme de ti.

Es lo único que tenemosOnde as histórias ganham vida. Descobre agora