Trying It [The King 2/4] BORRADOR

Capítulo Cuarenta y Siete

Capítulo Cuarenta y siete

¿Escuchan? ¡Campanas de boda! ¡Si, parecen acercarse nuevamente rumbo a la famosa banda The King, en el pasado, se escuchaban por Adam Bleir, pero ahora, estás van por el bellísimo Kyler Dustin.

Tal parece ser, que nuestro querido Kyler se abandonó en los brazos del amor y le pidió matrimonio en una prepocion muy romántica a su amada, Daya Coleman con quién comparten un dulce y hermoso bebé llamado Austin Dustin.

Esto fue durante la cena del pasado martes, la pareja lucía demasiado feliz, fuentes informan que hubo varios testigos que hasta grabaron el momento. Y que ellos "Parecían estar en una nube de amor".

Como sea, les deseamos suerte en su futuro matrimonio.
Millones de corazones Queens quedarán rotos, pero aún nos quedan Wilson y Jaxon, a no bajar la guardia.

- Wow. - Dice Stayce viendo mí anillo. - Mi corazón está rompiéndose. Mí Dustin se casa. - Dice y yo no puedo evitar reírme.
- Estoy muy feliz. Nunca pensé que casarme me iba hacer sentir así. La vez anterior...
- Quizás es porque es Kyler, es el amor épico de tu vida.
- Amor épico, tienes razón.
- Me siento tan... Feliz y abrumada al mismo tiempo. Amo esta pareja pero mí corazón Queen no lo resistirá.
- Debes resistirlo, serás mí dama de honor.
-¿Yo? - Pregunta sorprendida y  asiento. - Moriré. Definitivamente.

Nos quedamos en silencio porque unos gritos provenientes de la habitación de Jackson llegan a nosotras. Suspiro y me pongo de pie para dirigirme hacia donde el niño llora. Austin, también comienza a llorar, pero me urge más ir con Jack.

Cuando llego a la habitación, el está abrazado a sus piernitas mientras continúa llorando. No puedo evitar sentir las lágrimas agrupandose en mis ojos.  Me acerco a el de forma lenta, no quiero asustarlo.

Kyler es quien siempre logra ayudarlo. Pero él no está.

- Cariño. - Susurro sentándome en su cama. Tomandome por sorpresa, se acerca y se acurruca contra mí cuerpo. - Ya, mí niño hermoso. Todo está bien, todo estará bien.
- ¿Papi? - Pregunta y yo beso su cabecita.
-¿Kyler? - Pregunto sorprendida, el nos suele llamar por nuestros nombres. Noto que Austin ya no llora.
- Perdón. - Dice en un susurro.
- Papá está trabajando. Pronto regresa.
- si.
-¿Todo bien mí corazón?
- Si, mami. - Me dice y yo no lo resisto y las lágrimas caen.
- Bien mí pequeño ángel. Mami te cuida. - beso su frente una vez más y comienzo a meserme para que vuelva a dormir.

Cuando Jack está dormido, lo acomodo y beso su mejilla. Es mí pequeño guerrero asustado y fuerte.

- Te amo mí ángel. Mami te ama. - Digo en voz baja.

Me doy vuelta y me asustó cuando veo a Kyler de brazos cruzados en la puerta de la habitación. Me da una sonrisa y yo voy hacia el para que me abrace.

- Hola. - Susurra besando mis labios con ternura. - Vamos.

Caminamos fuera de la habitación y el limpia las lágrimas que solté.

-¿Que sucede? - Pregunta con preocupación.
- Me duele verlo sufrir. Siento que el psicólogo no lo ayuda.
- A mí también me duele verlo sufrir.
- Me dijo mami. - No puedo evitar decir. El me sonríe.
- Porque lo eres, eres su madre. La madre más sexy, caliente, guapa y buena de todas.
- Está Stayce. - digo recordando a mí amiga.
- Lo se, está con Austin, pensé que me necesitarías, pero ya veo que supiste manejarlo.
- El me dejo. Por primera vez. Normalmente te prefiere  ti.
- Es mí chico. - Me sonríe y lo abrazo.

Y pensar que estuvimos a punto de dejarlo por un desacuerdo en la adopción. El resulta ser el mejor padre de todos y el mejor novio ahora.

- Te amo Kyler, me alegra tanto que me hayas propuesto ser tu esposa.
- A mí me alegra que me hayas aceptado, nena. Stayce estaba un poco apurada, así que será mejor que vayamos a buscar a Austin.
- Si. - Digo alejándome de el, pero riendo, tira de mi brazo hasta que estoy en los suyos otra vez y me besa.
- Te amo yo también.

Sin poder evitar sonreír, voy hacia la sala y mí niño en cuanto me ve comienza a largar sonrisitas tirando de sus bracitos regordetes hacia mí. Lo tomo y besuqueo su mejilla.

- Mí pequeño Dustin. - Digo alborotandolo.
- El está loco por ti. - Dice Stayce con una sonrisa.
- Ella es la mujer de los chicos de la casa. - Dice Kyler abrazándome desde atrás y besando la cabecita de Austin. Sentimos un flash, miramos y se trata de mí amiga que aprovecha y saca otra foto.
- Solo falta el pequeño Jack y están todos. Lucen hermosos.
- Gracias, cariño. - Dice Kyler y ella no puede evitar sonrojarse.

Cuando luego de cenar, Austin se vuelve a dormir, camino con Jack hacia el sofá y nos sentamos para ver una película que el elige.

-¿Te gustan los perritos? - Pregunto y el me mira.
- Lindos.
- ¿Quisieras uno? - Vuelvo a cuestionar. El me mira con sus ojitos brillosos y una sonrisa crece en sus labios.
- ¡Si! - Dice muy feliz. Mira a Kyler que viene con las palomitas de maíz. -¿Perrito?
-¿Que, campeón? - Pregunta sentandose a su lado.
- Que le pregunté si quería un perrito.
-¿Lo quieres campeón? - Pregunta mí novio y sonrió. Por un momento imaginé una pelea por no consultarlo antes.
-Si.
- Entonces buscaremos uno pequeño, así no lástima a Austin ni a ti. ¿Te parece? Podemos ir mañana.
- Gracias. - Dice abrazándolo y besando su mejilla. - Toma las palomitas. - Dice dándole el bote.

Jack comienza a comer mientras miramos perros vs gatos, en ocasiones se ríe y esa risita es música para nuestros oídos.

-¿Y el perito poda hace eso?
-Ya veremos, le preguntamos al dueño. - Dice Kyle riendo.

Más o menos a mitad de películas descubrimos que nuestro pequeño está dormido, así que Kyler lo toma en brazos y el niño se aferra. Caminamos hacia su habitación y lo arropa. Luego deposita un beso en su frente.

- Te amo hijo. - Confiesa el, yo sonrió.
- Papi. - dice el y Kyle me mira sorprendido. Vuelve a besar su frente y salimos de la habitación.

Una vez afuera, me acorrala contra la pared, me hace enredar las piernas en su cintura y me besa de forma muy rápida.

- No se si primero hacerte el amor y luego hablar de la boda. O hablar de la boda y luego hacerte el amor.
- Yo diría que me hagas el amor, hablamos de la boda y luego volvemos hacer el amor.
- Definitivamente amo ese plan casi tanto como te amo a ti. Andando, corazón.

*pensé que lo había publicado, se ve que no se pudo. Disculpen las molestias*