Novena nota

834 98 4
                                    

He vuelto al café.

¿Cómo podía resistirme? 

No sé para qué lo hice. 

El día estaba ventoso y ella entró con tu chaqueta.

«El infierno existe, pero no creo que sea tan tortuoso como estos celos»

Cierro los párpados con fuerza para no llorar.

Me levanto y me voy.

Jamás podré soportarlo. 

Verte con ella.. en el café.

Un lugar que se supone debería ser nuestro.

Nuestro, qué estúpida. 

Esa palabra no existe. 

Notas y cookies »Secuela de Cartas a NadieWhere stories live. Discover now