LA LLEGADA Y EL DESEO CAP 1

16.7K 110 13
                                    

Una noche de otoño enviude, quisiera no contar esto porque me avergüenza a veces, pero quiero compartirlo porque se que alguien en el mundo ha pasado por algo similar.

Tengo 40 años y estoy mas sola que nada, sin hijos, sin marido y un trabajo que detesto, a veces pienso que me estoy muriendo en vida. Mi hermano esta preocupado por mi estado y me ha mandado a su hijo ya que estudiara cerca de donde vivo yo y para que no la pase tan mal, sinceramente no he visto a mi sobrino desde que tenia 10 años, así que calculo que ha de tener como 17, no se que costumbres tenga, ni sus gustos, prácticamente no se nada de el.

Llego el día de recoger a mi sobrino en el aeropuerto. Vaya, es un chico nerd, tímido, inocente y muy educado al parecer: -Hola tía soy Andres, tu sobrino- sonríe y agacha la mirada.
-Hola hijo, tu padre hablo bien de ti, espero que conserves eso que dijo, de ser educado y demás.- estaba un poco molesta por el trabajo.

Llegamos a casa y lo instale en una de las recamaras, le había puesto sabanas y cobijas nuevas, en el fondo estaba emocionada de que estuviera aquí. Le ordene que se bañara y que bajara a cenar, había pedido pizza. Cuando se estaba duchando me hablo porque no sabia con que secarse, subí por toallas limpias y se la deje en el retrete, aprovechando que estaba ahí, fui a cambiarme los zapatos para estar mas cómoda y cuando salí del cuarto vi a mi sobrino solo con la toalla en la cintura, dios que es lo que me pasa si es un niño, sentí una chispa como se encendía dentro de mi, algo que no sentía desde que me case, el no se dio cuenta de que lo estaba observando, se metió a su cuarto y cerro la puerta. Cuando estábamos cenando no me quitaba de la mente esa imagen de Andres casi desnudo, con cuerpo de hombre y ya no de niño, lo miraba e imaginaba lo que había debajo de su camisa, se nota que hace ejercicio.
Por dios pero que estoy pensando, tengo que calmar mis pensamientos y mis instintos humanos - fue lo que dije en ese momento.

para no hacer la cena tan tediosa y tensa comencé a preguntarle cosas sobre su vida para romper el hielo-

¿vienes de intercambio? - si, respondió, estoy emocionado porque es la mejor escuela del país, tendré un buen futuro-

vaya y me imagino que fue difícil para ti dejar a tus amigos tu vida allá - pues si un poco, pero todo pasa por algo. (todo pasa por algo, y me quedé con esa frase en la cabeza dando vueltas).

pasaron los días y se empezaba a relajar el ambiente, el se iba acoplando muy bien a la situación, se sentía bien conmigo, comencé a notar que cuando comíamos juntos me miraba mucho, no quise preguntar para no incomodarlo pero la verdad es que no me molestaba nada, hace mucho no me miraban como me miraba mi sobrino, me sentía sexy de nuevo.

un día mientras veía la computadora con un café en la mano me percate de que estaba observando mis piernas, tenía puesta un short como pijama y una playera con mangas cortas que dejaban a la imaginación, hacía algo de frió así que se notaba un poco mis pezones, ciertamente quería que se excitara cada que volteara su mirada hacia mi, tiene algo en sus ojos que me encanta.

¿que haces tía?- pregunto con curiosidad: estoy checando algunas cosas del trabajo pero ya casi termino. ¿puedes ayudarme a guardar el documento y a enviarlo por correo? porque yo con estas cosas me peleo y la verdad no le se bien.- Él acepto de inmediato y se puso detrás de mi enseñándome como es que se hacía, la verdad es que yo estaba muy excitada y quería que se acercara mas y pegara su cuerpo al mio, esos pequeños roces que me hacen imaginar. Estábamos solos, en pijama, muy cerca y mi mente volaba. - Ya esta listo tía ya lo enviaste (reímos) -le di las gracias con un beso en la mejilla y él quedó helado, sin saber que decir. Yo sabia que lo estaba provocando para que pasara lo que deseaba desde que lo vi en la ducha. Sin mas me di la vuelta y me fui a dormir.

Ya me estaba agarrando el sueño cuando de repente escucho como abre lentamente la puerta, claro yo como sabía, puse de mi parte para hacerlo mas interesante, sabia que él quería verme en ropa interior y entre sábanas así que le di gusto, justo antes de acostarme me quite la pijama y me quedé en brasier y calzón. Yo haciéndome la dormida comencé a moverme lentamente entre las delgadas sabanas de mi cama, me puse boca abajo mostrando parte de mis nalgas y la otra parte cubierta con la sabana incitándolo a que viniera a quitármela. De reojo voltee hacia la puerta donde estaba él y vi que tenia la mano en su pantalón, lanzando pequeños gemidos para que no lo escuchara, vaya estaba muy excitada y este juego cada vez me gustaba mucho más, me voltee y se hizo un poco hacia atrás, yo aun '' Dormida '' comencé a tocar mis pechos que ya estaban duros y mi sexo a punto de estallar, sin embargo no se dio cuenta de que estaba despierta, yo solo lo veía como se tocaba cada vez mas rápido y fantaseaba con mi cuerpo, me encantaba ser deseada por él. Continuará...

TODO QUEDA EN FAMILIAWhere stories live. Discover now