Capítulo 1

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— Hija, deberías bajar un rato, tus primos están abajo.

— Si, ahora bajo. Un capítulo y ya. — mencioné mientras mis ojos se paseaban por las líneas de mi novela.

Afuera hacía demasiado frío por lo que decidí quedarme en mi recámara a leer. Hoy es viernes y llegué hace unas horas. Mamá se alegró al verme entrar por la puerta puesto que no se esperaba que llegara tan pronto. Pero necesitaba un respiro también.

De hecho por recordar lo sucedido es que opté por bajar de una vez a entretenerme con mis primos pequeños y mis tías que venían de visita.

— ¡Rachel! Pero qué grande estás, niña.— mi tía Clarissa me tomó de las mejillas apretándolas una vez llegué a la sala de estar en donde se encontraban conversando mis tías con mi madre.

Sonreí.

— Tía Clarissa, tia Marlen — saludé al verlas con entusiasmo.

— Hola querida, ¿qué tal el viaje?— tía Marlen cuestionó.

— Cansado la verdad.

— Entonces deberías descansar un poco.— dijo mamá.

— No, estoy bien. — contesté— ¿Dónde están los pequeños?

— En el jardín trasero.

— Muy bien, iré a divertirme con ellos un rato.

— De acuerdo pero no tarden que ya estará lista la comida.

— ¡Que bueno! Muero de hambre — acaricié mi abdomen para dar referencia a lo que las tres adultas rieron.

Salí de la casa para dirigirme al patio trasero y encontré a los pequeños Adele, Liam y Anthony jugar. Me uní a ellos y jugamos un rato.

Me hicieron olvidar por  un momento lo que había pasado.

Lograron hacerme olvidar la mentira de Ian.

Así pasé la tarde.

Lo malo sería darme de golpe con la realidad una vez regrese.

Las cosas no siempre suceden como uno quiere. Eso lo sé perfectamente.

Si el destino así lo dicta, así será.

Si Dios así lo quiere y lo tiene planeado, así será.

Pero duele, duele cuando la persona a la que más amas te traiciona.

Es difícil y un proceso lento el olvidar a esa persona o superarla. Supongo que aún tengo tiempo, supongo que aún estoy comenzando a asimilarlo.

Mientras tanto no tenía porqué deprimirme más, debo disfrutar mi pequeño descanso antes de regresar a la universidad.

Por si están un poco perdidos les daré una pequeña introducción de mi vida.

Bien, aquí vamos...

Mi nombre es Rachel Williams.

Hija única.

Vivo con mi madre o bueno, vivía antes de cambiarme de residencia por la universidad. Somos las dos contra el mundo, aunque claro que la pequeña familia de mi madre nos apoya en situaciones difíciles.

Residíamos en un pequeño pueblo famoso por sus festivales no muy lejos de la ciudad. Cuenta con un clima frío la mayor parte del tiempo, los alrededores del pueblo se ven limitados por grandes árboles y pinos, bosques.

En fin, una hermosura si me lo preguntan.

Mi padre abandonó a mi madre cuando yo tenía tan sólo seis años. Triste ¿no?

Heridas que se desvanecen Where stories live. Discover now