Capítulo #36:Visita Inesperada Parte 2[Capítulos Finales]

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*Narra Tin*

Can abre la puerta y deja caer una pisada en el pasto, siento que lo nuestro ha terminado. Quito las llaves de la camioneta, por seguridad, y bajo al mismo tiempo, pero a una velocidad menor. Saluda a su madre con un beso y me acerco a ella.

—Buenos días, soy Tin.

Me mira con odio, su padre oye lo que digo y exclama:

— ¿Tú eres Tin?

—Si, soy yo.

Su padre deja caer una fuerte cachetada sobre mí y caigo sobre el pasto. Can grita mi nombre y cuando trata de correr hacia mí, su padre hace lo mismo con él.

— ¡Lárgate! ¡Te quiero lejos de mi hijo, maricón!

Maricón. Maricón. Maricón.

"Vamos, maricón. Trágate todo, ahora eres mi putita". Las palabras de mi tío resonaban en mi cerebro al escuchar esa palabra. Me levanto y me limpio. Can sigue sollozando mi nombre mientras su padre lo mete a la casa a las fuerzas. Golpeo la puerta pero todo intento para entrar es imposible.

— ¡Lárgate de aquí antes de que llame a la policía!

Ya no había nada que hacer, camino a la camioneta y comienzo a llorar sobre el volante, oyendo mis llantos y uno que otro grito de Can, lo había perdido.

*Narra Can*

Siento la mano caliente sobre mi cara después de querer interponerme entre su agresión a Tin. Me toma del cabello y abre la puerta de la casa de una sola patada, destruyendo el cerrojo. Me tira sobre la escalera y siento algo romperse sobre mí. Cierra la puerta y mi madre sube, no se a donde pero sube, dejándome solo con mi padre.

Oigo a Tin gritar por el otro lado de la madera, tratando de que mi padre abriera la puerta.

— ¡Lárgate de aquí antes de que llame a la policía!

Mi padre me toma al intentar abrir la puerta y me avienta contra el suelo.

— ¡Eres un maldito marica! ¡Yo no te crié de esta forma!

Pone su pie contra mi cabeza haciéndome retorcerme del dolor, algo a lo que estaba acostumbrado.

— ¡Déjame! ¡Yo lo amo!

No hay nada más que contar, mi padre básicamente iba a comenzar su tortura, golpes sobre el cadete indisciplinado, en este caso yo... para él, el amor no es equitativo.

*Narra Ae*

—Muchas gracias, mamá de Pete. Es hora de irme.

— ¿No vas a quedarte a cenar?

—Por hoy no, tengo una cita con un amigo.

—Cuidadito y tratas de engañar a mi hijo.

Me pongo rojo y Pete solamente se tapa la cara con uno de los cojines.

—Yo no soy así, confíe en mí. Bueno, hasta luego.

Me despido con un beso en la mejilla y Pete me acompaña hasta el auto.

— ¿Y con quién te vas a encontrar?

—Con un viejo e íntimo amigo... no lo conoces.

—Bueno, ¿Pero al menos puedo saber su nombre?

—Se llama Toey... No lo conoces.

—Está bien, cuídate. No hagas travesuras. Entonces, ¿Pasas por mi mañana a las 8?

—Si, aquí estaré.

—Te esperaré aquí afuera o mi mamá te obligará a desayunar con ella.

— ¿No quieres que desayunemos en familia?

—Si, pero... Quiero desayunar otra cosa.

Me pone contra el carro y sus labios van a mi cuello, Can sabía excitarme. Comienzo a gemir su nombre y mi teléfono suena.

—Pete, debo irme. Guárdalo para mañana.

—Siempre me dejas caliente, pero ni modos. Esperaré.

Sus labios se encuentran con los míos para despedirnos y su mano viaja fugazmente por mis nalgas e imita el sonido de un gato. Solo río y me meto al auto, me dirijo al
Starbucks donde me había quedado y entro... No veía a Toey.

Marco al número que mi teléfono había registrado y le marco, contesta al tercer timbrazo.

—No viniste.

—Estoy aquí, soy el chico con chamarra gris y gorra roja.

Diviso a lo lejos las características y camino hacia la mesa donde se encontraba Toey y 2 vasos de café.

—Ya llegué.

—Es un gusto volverte a ver, Ae.

—Sabes, nunca antes me había vuelto a encontrar con mis conquistas. Siempre es algo de una noche y listo, pero tú eres diferente.

—Gracias Ae... y de eso quería hablar contigo.

Tomo uno de los vasos y de reojo lo veo quitarse la gorra roja dejando al descubierto a un irreconocible y demacrado Toey.

—Wow, ¿Qué te ha pasado?

Doy un sorbo al café hirviente cuando dice:

—Tengo sida.

Un escalofrió llena mi boca y suelto el café sobre la mesa, dejándolo hablar.

—1 semana después de que tu y yo... nos conociéramos comencé a sentirme mal, fui al doctor y me hizo un análisis completo, soy portador del virus, el cual comenzó a esparcirse por mi cuerpo hace 2 meses... 1 mes después de nuestro encuentro.

Me levanto de la mesa y salgo por la puerta, dejándolo solo y comienzo a llorar cuando una lluvia cae sobre la ciudad. Tengo sida. Pete tal vez tenga sida. Voy a morir. Mi vida estaba arruinada, había arruinado también la de Pete. Solo había una forma de averiguarlo.

Enciendo el motor y checo la hora, eran casi las 8 y el hospital cerraba a las 10. Llego lo más rápido que puedo y pido hablar con mi doctor privado.

—Es una sorpresa verte, Ae.

—Si, es que quiero hacerle unas preguntas... Bueno, antes nada quiero decirle que soy gay y pues tengo un novio con el cual mantengo relaciones sexuales y...

— ¿Usas preservativos?

—Si, pero...

—No tienes de que preocuparte, al menos que hagan el swinging, osea, intercambio de parejas.

—No, no practico eso. Pero antes de que él y yo fuéramos novios... Yo mantenía relaciones con el primer chico que pasara enfrente mío y pues no sé si yo... Usted sabe.

—Puedo prepararte una cita para que te hagas un exámen.

—Me encantaría hacerlo lo más pronto posible.

— ¿Puedes el lunes?

—Tengo escuela, pero puedo faltar.

—Está bien, nos vemos el lunes a las 9:30 am. Y si quieres, también trae a tu novio.

—Ese es otro problema, el es menor de edad y...

—Ae, esto es un delito. Eres mayor de edad y tu novio no, ¿Sabes que puedes obtener una demanda si tu novio llega a tener algo? Te iría mal, mancharías la imagen de los Perawat.

—No hable de mi familia, yo soy adoptado. Debo irme.

—Oh, disculpa si te incomodé. Lo siento mucho. Nos vemos Ae.

—Igualmente doctor.

Salgo de su consultorio y todo gira a mí alrededor, mi vida destruida solo por una follada, tal vez. Lo único que me daba calma era destruir la vida de los demás, era lo que me daba ganar de seguir adelante cada día, ver sufrir a Can, sí, eso me encantaba y sin duda, había encontrado ahora la mejor manera de hacer que él y su novio sufrieran.

Por Siempre Junto A Ti(TinCan) {FanFic}Où les histoires vivent. Découvrez maintenant