Beside You - Luke Hemmings ♡

66 - "Positivo"

Positivo.

Una nueva vida crece en el vientre de mi mejor amiga de solo diecisiete años. Es una muy buena razón para sentir nervios, consternación, pánico. Deseo poder ir y acariciar su cabellera mientras le susurro que todo saldrá bien, en cambio, lo único que viene a mi cabeza es "la casita"

Hace muchos años atrás, Alisson y yo jugábamos por horas en la pequeña casa del árbol que su padre había construido para ella en mitad del jardín. Nos habíamos pasado días arreglándola cuando estuvo lista, la amueblamos con sillitas de colores, una cortina vieja, juguetes y mi nuevo juego de Té. Era nuestra obra maestra.

Cuando al fin estuvo lista, nos vestimos con nuestros mejores vestidos para tener una digna inauguración. Papá nos había comprado jugo de naranja para brindar y la madre de Alisson nos regaló galletitas de chocolate. Todo salía perfecto, reímos y jugamos por horas, hasta que el sol comenzó a ocultase. A pesar de eso, concordamos en que nuestra celebración debía continuar por más tiempo, pero nuestras galletitas se habían acabado.

Ali se levantó de nuestra pequeña mesa para ir por más a la cocina. La miré bajar los escalones de madera con sumo cuidado, todos atornillados sólidos al tronco del árbol, excepto uno. El pie de Ali resbaló y su cuerpo cayó al césped desde una altura de dos metros. Lo cual es bastante considerable para una niña de ocho años.

Recuerdo lo asustada que me encontraba, los peores pensamientos rondaron mi cabeza hasta que bajé con cuidado y me coloqué a su lado. Ella seguía consciente, pero el dolor no la dejaba llorar con fuerza, sus lágrimas se deslizan de los ojos, pero no había llanto. En ningún momento la moví, sólo peinaba su cabello asegurándole que todo estaría bien. Ella miró mis ojos, tomó mi mano con fuerza y asintió. Estábamos juntas en eso.

Sus padres la llevaron al hospital y estuvo allí sólo una noche, luego volvió a casa con un collarín y su energía había vuelto a pesar de la lesión.

El recuerdo más vivo que tengo de aquel momento, es el pánico que ella tenía en sus ojos, el mismo pánico que sentí yo al verla caer.

El mismo pánico que estamos sintiendo ahora.

Lagrimas corrían de mis ojos, sin llanto, solo lágrimas. La emoción me había dejado en shock y de algún modo tenía que drenar. Me senté a su lado, al otro se encontraba Josh. No necesité decir nada, ella no necesitó mirar mi rostro para saber que la mano que sostenía la suya era mía, mi apoyo.

-Todo estará bien. Nos aseguraremos de que sea así.

-Esto es diferente -su voz se quiebra.

-Otro reto. No es lo que estaba en los planes, pero es una realidad y vamos a afrontarla -dice Josh.

Siento alivio cuando le oigo decir eso, yo no soportaría ver a Alisson pasar por esto sin el padre del bebé.

-Ustedes no entienden ¿qué les diré a mis padres? Ellos van a matarme.

-Sabes que no lo harán. Sí, estarán molestos y decepcionados, pero tendrán que aceptarlo, pues no hay marcha atrás -digo.

-Yo iré contigo, les diremos juntos -propone Josh.

- ¿Ali?

Quita sus manos de los ojos, dejando ver el profundo celeste en ellos, rodeado de irritación debido al llanto.

-Quiero que estés completamente segura de que te apoyaremos en esto, y no sólo durante nueve meses, yo estaré ahí cuando cualquiera de los dos me necesite -señalo su abdomen, ahora lleno de vida.

Me abraza, fuerte. De esos abrazos que transmiten sentimiento, de esos que reconfortan, de los que necesitan cuando la torre se está derrumbando.

Nos mantenemos ahí por un rato, lo suficiente para calmar su llanto. Luego se da vuelta y mira a Josh. Lo abraza, lo besa. Él peina su cabello, algunos de sus mechones se han salido de la cola alta que sostiene su melena.