-¡Los odio! ¡No pueden hacerme eso! No es justo- golpeé los almohadones del sofá de Keb.
-Hay un lado bueno en todo esto…- dijo Zac al mismo tiempo que se desplomaba a mi lado. –Puedes verme a diario, no vas a extrañarme ¡Estaremos en la misma ciudad! Al menos no te faltará un amigo para salir de fiesta-
-No creo que vayamos a divertirnos demasiado Zac, Boston apesta-
-Nosotros haremos la diferencia- me guiñó
-Boston está mucho más cerca de Nueva York que Oregon, estaré cerca si me necesitas- agregó Keb.
-Todos estaremos cerca, bueno excepto Franz que estará al otro lado del país, pero quien lo necesita- bromé Connor recibiendo un “almohadanazo” de parte del agredido.
-¡Hey! Estoy aquí mismo-
-No quiero ofender chicos, pero no creo que ustedes estén entendiendo, mientras ustedes estén conociendo personas nuevas, divirtiéndose y haciendo nuevas amistades, yo- resalté –Tendré que regresar a mi antiguo colegio, con mis odiosos compañeros y sobre todo…-
-Tendrás que ver a Luke- Zac terminó la frase por mí.
-Exacto- respondí.
-Ya encontrarás la forma de evitarlo Mandy, además tienes todo el verano antes de regresar al colegio-
-¡No me lo recuerdes! ¿Qué se supone que vaya a hacer todo el verano?- me cubrí el rostro con las manos fingiendo llorar.
-No seas tan dramática, estaré allí a mitad del verano- Zac trataba en vano de animarme.
-Genial, solo tengo que pasar la mitad del verano encerrada en mi cuarto- comenté, sarcástica –Aunque si lo pienso mejor, no puede ser tan malo, fue lo que hice el verano pasado…-
-¿Qué hay de Rosie? ¿La prima de Luke? Ella era tu vecina también ¿Cierto?- La idea de Franz habría sido magnifica de no ser porque…
-No he hablado con ella en meses- me recosté en el sillón, pero cuando escuché la bocina del coche rentado de mi padre afuera, sentí ganas de llorar, correr, desaparecer. –Llegaron- suspiré.
Esta mañana los chicos me habían recogido para desayunar juntos por última vez antes de que me fuera. Todo estaba listo en mi casa para la mudanza, por lo que mis padres partirían esa misma tarde y habían acordado dejarme con mis amigos hasta ese momento.
-¿Quieres que los sigamos hasta el aeropuerto? Atrasaremos la despedida un poco más- Dijo Connor.
-No, eso es más terrible aún- lo abracé –Odio las despedidas-
-Voy a extrañarte ¡Te perderás nuestra graduación, odio a tus padres!-
-No más que yo Keb, de eso puedes estar seguro-
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On my way
Teen FictionLa vida de Amanda cambió para siempre con la muerte de su mejor amiga y vecina, Lily. Lo que Mandy no sabía, es que a veces, con la llegada de una persona especial, nuestra vida puede dar un giro tan grande como el de cuando otra decide partir.
