Capítulo 5: ¡Escapando de las fans!

2.1K 80 22
                                    

Corríamos a toda velocidad por los amplios corredores exteriores con las miles de fans persiguiéndonos como hambrientos leones. En este caso yo era una pequeña, aterrorizada e inexperta cebra con un instinto enorme por sobrevivir y Liam, una hermosa gacela sin otra preocupación más que proporcionarme un bruto empujón cuando me veía disminuir la velocidad…

—¡Date prisa!—me regañó tirándome del brazo por centésima vez. Lo miré hartada.

—No puedo, ¿qué no ves? —y le señalé mis pies—Estoy sobre unos tacones de diez centímetros. Tenme compasión…

—¿Compasión?, ¡quítatelos!—me ordenó jadeante.

—¡Ni hablar!

—¡Así iremos más rápido!

—¡De ninguna manera!—me negué rotundamente. Liam me miró de soslayo, amenazante.

Pero quitarme los tacones para mí era como despojarme de la poca femineidad con la que contaba. No lo haría por nada en el mundo y mucho menos delante de él.

—¡Demonios, eres una terca!—exclamó al ver que no le obedecía. Quise defenderme pero los gritos de las fieras me frenaron.

—¡LIAAAAAAAAAM!, ¡DETENTE POR FAVOR! ¡LIAAAAAAAAAM!

—¡Dios santo, vienen muy rápido!—le comenté asustada mirando por encima de mi hombro—¡Van a alcanzarnos!

La estrella de rock que había vuelto a adelantarse varios metros, volvió para tironearme del brazo otra vez.

—No te preocupes, tu solo sigue corriendo. —dijo algo fastidiado por mi lentitud. Pero no le creí.

¿Qué no debía preocuparme? Ya casi nada nos separaba de ellas. Incluso ya podía distinguir sus rostros llenos de desesperación e instinto asesino, locas por Liam.

—¡Van a matarte! ¡VAN A MATARTE! —chillé perturbada. El chico me dedicó una mirada envenenada.

—¡Solo limítate a correr!

Lo obedecí a regañadientes y seguí corriendo hasta que algo me rozó la coronilla. Chillé. ¿Acaso me habían lanzado algo? No tuve tiempo de pensar qué pues pronto doblamos una esquina y Liam me tomó de la cintura para desviarme por la derecha hacia un estrecho pasillo. Seguimos por aquel corredor hasta que volvimos a cruzarnos con otra desviación.

—Por la izquierda. —me indicó, y lo seguí corriendo.

Otra vez algo me rozó la coronilla. ¿Qué demonios me estaban lanzando? ¡Argh! Ya estaba harta. Sentí un punzante dolor en el lado derecho de mi abdomen. ¿Por qué Liam me había arrastrado a esto con él?

En un momento, el griterío de las fans volvió a oírse con claridad.

—¡LIAM, DETENTE POR FAVOR! ¡SOLO QUEREMOS SALUDARTE!

—¡Si claro!, detente Liam, solo quieren saludarte…—repetí en forma sarcástica. Ya me habían fastidiado—…y besarte, manosearte, violarte y vaya una a saber que otras locuras más…¿Te ves en la sección policiaca del periódico?

El rubio me miró con odio.

—Sabes, a John Lennon lo mató un fan… ¿Crees que correrás la misma suerte?

Solo lo hacía para molestarlo. Es que, aquellas tupidas cejas de color castaño se juntaban para formar una sola cuando lo perturbaba y simplemente, no podía resistírmele. Además era como un desquite de mi parte por haberme arrastrado con él.

—¿Y si te alcanzaran y…?

—¡Deja de decir esas cosas y utiliza esa fuerza para correr! —me interrumpió cansado de mis comentarios morbosos.

Love SongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora