Capítulo 4.

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Una cabellera rubia se asomo en la mirada de la peligris, era nada mas que Draco Malfoy quien abría la puerta, le hecho una mirada examinándola cada parte de su cuerpo y luego su rostro, sonrió y pensó 'Pensé que seria una anciana fea' pero no era lo que pensaba, estaba demasiado guapa, tanto que lo dejaba sin habla.
Otra cabellera rubia apareció en su vista pero esta vez era una cabellera larga, Lucius Malfoy, ambos, él chico y él padre se la estaban comiendo con la mirada, sinceramente no le molestaba ya que siempre le pasaba.

-Señorita Yaxley, es un gusto tenerla aqui- Dijo él rubio de cabellera larga, agarrando la mano de la peligris y apoyando sus labios en esta dándole un leve beso-Pasa, los elfos ya tiene la cena lista-Le dejo las para que logre pasar y ella lo hizo, luego vio al rubio menor-

-Veo que no nos han presentado-Le dedico una sonrisa al rubio menor, haciendo salir de la boca del chico y su padre un leve suspiro- Soy Artemisa Gemma Yaxley B.- sonrió con algo de superioridad y miro al rubio mayor, que sonreia apenas de lado-

-Un gusto Señorita Yaxley, me presento soy Draco Lucius Malfoy-Lucius de segundo nombre, río apenas no podía esperar menos del rubio mayor, él chico al igual que su padre beso su mano y sonrió de lado-

-Draco ve a buscar a tu madre que no sale mas de él cuarto, dile que llego la invitada-sonrio sin apartar la vista de la peligris, mientras ella caminaba pasando su dedo por unos muebles hermosos y por como eran seguro que también costaban mas dinero que cualquier casa muggle.-

Él rubio menor asintió subiendo escaleras arriba y desapareciendo de la sala, ella camino hasta pasar una puerta y aparecer en él comedor, donde la mesa ya estaba puesta con platos y cubiertos indicados, se dio vuelta y no espero pensar que él rubio estaba tras ella, así que choco apenas con él y lo miro.
Una de las tantas cosas que describían a Artemisa es que era muy manipuladora y le gustaba jugar con las personas, se le ocurrió jugar un poco con Malfoy ya que se encontraba algo aburrida mientras esperaba a él niño y su madre.

-Oh, señor Malfoy lo siento-de sus labios salio una sonrisa tímida, algo que al rubio le llamo la atención ya que no se veía todos los días esa sonrisa en la cara de Artemisa-

-No pasa nada señorita Yaxley-ella negó apenas y cambio su sonrisa en una algo más provocadora y hermosa-

-Ya deja las formalidades, simplemente llámame Artemisa o Misa como desees- se dio vuelta y camino a unos cuadros de la casa, moviendo sus caderas provocativamente haciendo que él rubio se muerda apenas él labio-

-Bueno entonces usted pude llamarme Lucius, Artemisa- camino hasta su lado y ella se dio vuelta mirándolo a los ojo, estaba bastante cerca-

-Sabe Lucius me gusta jugar bastante- sonrió inocente y lo miro esperando la respuesta de este-

-¿Y a que le gusta jugar?- separo sus labios apenas y camino hacia él, mientras lo empujaba apenas con una mano hasta hacerlo caer arriba de un sillón negro, puso sus piernas a un lado y se sentó en su regazo, sin importarle nada beso al rubio con mucha lujuria y este sonrió apenas de lado, siguiendo al mismo ritmo él beso mientras ponía sus manos en la cintura de la peligris.

Artemisa comenzó moviendo sus caderas arriba de él y al sentir algo punzante en su entrepierna sonrió de lado y se acercó al oído del rubio, lo mordió levemente para luego susurrarle.

-Lo siento creo que te he dejado con un problema entre sus piernas- En eso se escuchaba los tacones de la señora Black bajando aquella escalera- Y le ayudaria a bajarselo si su esposa no vendría, sera la próxima-rio juguetona para luego levantarse y acomodarse apenas él vestido que se le había subido, le encantaba que apenas con un toque los hombres se pusieran calientes a sus pies, era algo que amaba demasiado, hizo como si miraba los cuadros mientras veía como Narcisa Malfoy aparecía en su vista y como él rubio mayor salia de él cuarto rápido hacia él baño-

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