Capitulo 12

1.6K 81 3
                                    

Narra Alysa

Al día siguiente me desperté y antes de abrir mis ojos me di cuenta de que tenia algo entre mis brazos. Lentamente abrí mis ojos mientras la luz que entraba por la ventana me cegaba un poco.

Cuando mi vista se acostumbro pude ver a mi hermana entre mis brazos dormida cálidamente con una sonrisa. Era bonito verla así.

Pero tenia ganas de ir al baño...así que tenia que moverla si o si. No quería hacerlo, pero en este caso no me quedaba otra.

La moví un poco y nada...empecé a moverme lentamente mientras poco a poco la alejaba. Pero justo cuando iba a librarme del todo se movió.

- ¿Q...que haces?

- Perdona...no quería despertarte pero quería levantarme.

De ella salio un bostezo y se alejo un poco de mi para que me pudiera levantar. Pero siguió en la misma posición en la cual estaba antes.

Rápidamente me levante pero sin mover mucho la cama.

- Vuelve pronto...quiero estar más contigo...

- Esta bien, solo voy al baño.

Salí de la habitación y me fui directamente al baño.

Cuando salí del baño mire la hora que era...

Todavía era temprano, así que podía estar un poco más con Malen antes de empezar a discutir con mi padre.

Entre en la habitación y ella seguía en la misma posición y con los ojos cerrados, al parecer seguía teniendo sueño.

No pude evitar reírme un poco antes de empezar a moverme. Después me metí en la cama sin decir nada y sin darme cuenta enseguida me vi envuelta en sus brazos.

- Te quiero...

- Yo también.

- Estaremos siempre juntas.

- ¿Pasa algo?

- Solo quería decirlo.

- Esta bien.

Pasamos minutos así hablando de nuestras cosas hasta que decidí que era hora de parar esto y volver a la realidad.

- ¿Ya es suficiente no crees?

- ¿En serio?

- Eres una babosa.

- ¡No lo soy!

- Un poquito

- ¡Que no!

Solo pude reírme ante su actitud, me gustaba hacerla enfadar para ver su cara molesta. Me hacia gracia.

- Tengo hambre, vamos a desayunar.

- Esta bien...

Me soltó y salimos de la habitación para ir a la cocina. Justamente mi padre estaba allí ya que era sábado y los sábados entraba mas tarde a trabajar.

- Buenos días padre.

- Buenos días chicas.

- Si...Buenos días.

Nos acercamos a la mesa y vimos que estaba el desayuno preparado. Tenia buena pinta, había de todo pero mi tripa no quería nada de nada.

Malen se sentó al lado de papa y yo me quede donde estaba mirando.

- ¿No vas a comer?

- No tengo hambre...

- ¿Estas bien?

¿Enemigos o algo mas? (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora