Happily »Niall y tú«

Capt. 32 ''Él.''

Capítulo 32

–Lo siento, Niall. De verdad lo siento mucho. – seguías llorando y ahora tenías hipo.
Niall seguía abrazándote y ahora acariciaba tu cabello.
– No importa más. Tranquila. – dijo y besó tu frente.
Lo miraste a los ojos y el te atrajo hacia sus labios.

Comenzaron a besarse. Se necesitaban uno a otro. Con ese beso, estaban volviendo a reunir cada pedazo de su corazón que habían perdido mientras estuvieron separados. Se querían, se amaban y sobre todo, se necesitaban.

Estuvieron besándose por algunos minutos y luego Niall se separó un poco.
– Te amo. – dijo Niall.
Sonreíste en sus labios. – Yo también te amo. – le respondiste.
– No vuelvas a dejarme nunca más. ¿Entendido? – preguntó con los ojos aún cerrados.
– Entendido. – le dijiste y volvieron a besarse nuevamente.

Ya habían pasado unos treinta minutos desde que habían comenzado a besarse, ahora eran las 6:15p.m.
– ¿Vienes a casa conmigo? – preguntó Niall.
– No puedo. Hay alguien que me espera en mi casa. – dijiste sonriendo.
Niall levantó una ceja y rió un poco. – ¿Ah, sí?
– ¿Quieres conocerlo?
– Sí, seguro.

Niall y tú no tardaron mucho en llegar a tu departamento ya que no había presa en la autopista.

Entraron en el edificio, luego en el ascensor y apretaste el botón del número de tu piso. Sacaste las llaves de tu bolso y abriste la puerta.

Tommy llegó inmediatamente corriendo, ladrando y moviendo su colita muy contento.
– Niall, él es Tommy.
Niall rió un poco y se agachó para acariciar al perro.
Tommy comenzó a lamer la mano de Niall y a olerla también.
– Creo que le agradas. – le dijiste riendo.
– Eso creo también. – se levantó con Tommy en los brazos y rió un poco, acariciando su cabecita haciendo que las orejas del cachorro se movieran de un lado a otro.
–Niall, tienes la mano llena de baba de perro. – le dijiste riendo y negando un poco con la cabeza. – Ve a lavarte la mano y yo iré un segundo arriba a cambiarme. – dijiste.
Llevabas zapatos de tacón y ya comenzaban a dolerte, aparte que la falda y la camisa no ayudaban a mantener el calor y comenzaba a hacer un poco de frío.
Te pusiste unos pantalones largos lila de seda, una camisa negra de magas cortas y un par de medias.

Cuando bajaste a la sala, Niall se encontraba mirando por el gran ventanal que tenía vista a la ciudad iluminada.

– ¿Tenías frío? – preguntó Niall mirándote de arriba abajo y riendo con ternura.
– Un poco. – reíste.
– Ven. – dijo Niall abriendo sus brazos para recibirte en un abrazo.

Caminaste hasta él y lo abrazaste fuerte. Lo extrañabas mucho y ahora deberían recompensar esos días que no estuvieron cerca uno de otro.  
Solamente él podía hacerte sentir tan segura cuando te abrazaba. Algo así como si él fuera una muralla contra todo lo que quisiera dañarte. Lo amabas. Lo amabas inmensamente. Cuando estaba Niall cerca, solo existía él para ti. Él.

*Lo siento, debo irme. Cuando regrese, subiré otro capt y lo dedicaré.
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