Capítulo 14 "Corriendo con los lobos"

2 0 0
                                    

Arya

La noche había caído en Lonstel. O bueno, eso veía desde la pequeña ventana que tenía en el baño.

Estaba desnuda, en mi Tina con espuma cubriendo mi cuerpo. Me había ido de la habitación de Aless desde hace más de de cuatro horas. Estar con él me hacía sentir atrapada. Como si su sola presencia en mi mente me causara un conflicto existencial.

-Idiota-. Me dije a mí misma.

Cuando Bastian y yo éramos muy pequeños, nuestro abuelo siempre nos compraba un helado después de la escuela.

Mi favorito era el de chocolate, y a Bastian le encantaba la vainilla.

-¿Y Cass, abuelo?- le preguntaba siempre Bastian-¿Por qué el no come helado con nosotros?

-Porque él está con sus padres- siempre le contestaba-. Estoy seguro que tiene un montón en su nevera.

Mi madre me peinaba con dos coletas bajas, antes de la escuela me ponía un aceite que hacía lucir a mi cabello aún más castaño. Era la envidia de todas mis amigas. Incluso mi maestra se tomaba casi media hora en peinarlo. Le gustaba hacer peinados especiales con mi cabello, solo con el mío.

-Cass debería venir con nosotros- le dije a mi abuelo.

El me sonrió y me limpio la cara con una servilleta que tenía en su traje.

-Algún día pequeña, algún día.

Y ese día nunca llegó...

Mi celular que estaba a un lado de mi bañera sonó. Me sequé las manos en la toalla que estaba a un lado de éste y lo conteste.

-Arya- dijo Bastian al otro lado del teléfono

-Bastian, hola.

-sé que es muy tarde pero necesitamos hablar

-Claro... ¿sobre qué?- pregunté sentándome en la bañera.

-Es sobre Joahan- dijo casi susurrando.

Al escuchar ese nombre mi piel se erizó

-¿Joahan?- balbuceé-¿Qué pasa con el?

-Lo encontré. Está aquí en el hospital Doven.

No sabía qué decir. No me salían las palabras. Me quedé muda.

-Arya- dijo Bastian del otro del teléfono-. Arya ¿estás ahí?

Colgué inmediatamente y me puse la toalla de baño.

Salí de esa habitación y fui hacia mi cuarto.

Mi cabello húmedo se me había pegado en las mejillas y en la espalda, me lo quité con las manos.

Frente a mi cama había una cómoda. La abrí y me hinque para poder buscar entre las cosas que había.

-Vamos, vamos- decía entre mi.

Había papeles, muñecas viejas y hasta abajo encontré unos guantes negros.

Unos guantes negros manchados con sangre. Los tome con ambas manos y los apreté viendo a la nada.

-Hey, Arya- dijo alguien del otro lado de mi puerta.

Me dio un mini susto. Puse los guantes donde estaban y cerré la cómoda.

-Arya- dijeron otra vez mientras tocaban.

Me paré del suelo y fui hacia la puerta para abrirla.

-Adam- dije asombrada.

-Voy a ordenar comida italiana ¿Te pido algo?- me dijo con una voz diferente.

Los DiValtimore, Desmiente (Los DiValtimore #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora