CASTIGO

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❤(っ^▿^)NAI

Los intendentes llegaron detrás de la vampiresa y nos mandaron directo a la oficina del director. Audrina, descubrí que así se llamaba la chica vampiro, como testigo. Trevor, Ian y yo como los culpables del destrozo de mobiliario escolar.

La directora estaba muy enojada por lo acontecido, llamó a mamá pero no pudo contactarla, así que llamó a nuestro hermano mayor, Laurent, en su lugar. Los padres de Trevor estaban del otro lado del país y era imposible que dejaran sus trabajos para ver como regañaban y castigaban a su hijo por su mal comportamiento.

Nuestro castigo fue reparar el mobiliario y ayudar en los preparativos de la kermesse.

Reparar el mobiliario era pan comido, siempre hacíamos destrozos en casa y nos habíamos vuelto unos expertos en reparaciones. Además Jules, Santiago y Dominic estaban esperando a que saliéramos para regresar a casa. Ellos tendrían que echarnos una mano si querían comer el estofado especial que mamá nos había prometido para hoy.

Mamá obviamente se enteró inmediatamente de lo sucedido y estaba muy molesta, yo no entendía por qué.

Al salir de la oficina, Audrina me jaloneó del brazo hasta el baño de mujeres que convenientemente estaba al lado de la dirección. Simplemente al cerrarse la puerta su mano derecha impactó contra mi mejilla. Y vaya que vi estrellitas por unos instantes.

Audrina estaba muy enojada, había perdido a un posible integrante para su clan por mi culpa. Ahora Trevor no podía unirse a ningún otro clan de vampiros, puesto que yo le había ofrecido la sangre y ahora era mi problema. Ahora podía leer entre líneas lo que había dicho en clase de naturales. Ella buscaba miembros para su clan y que más fácil que un vampiro sin líder.

Ahora entendía por qué mamá estaba tan molesta, convertí a un vampiro en miembro de la manada. Y además tendría que faltar a la primera parte de la ceremonia luctuosa de papá. ¿Acaso esto podría ser peor?

MANADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora